Alerta medioambiental y rescate en Bakio

Ambos simulacros se desarrollaron bajo la supervisión del director de Atención de Emergencias y Meteorología del Gobierno Vasco, Joseba Zorrilla, así como ante la presencia de la diputada de Medio Natural y Agricultura de Bizkaia, Arantza Atutxa, y la alcaldesa de Bakio, Amets Jauregizar.

«La seguridad y la limpieza de las playas son dos de las cuestiones que mejor valoran los visitantes a los arenales y, por tanto, seguiremos aspirando a dotar a estos entornos de los máximos niveles, en ambos sentidos», apuntó Arantza Atutxa.

En torno al mediodía y ante la mirada curiosa de los bañistas que aprovecharon la jornada soleada de hoy para disfrutar de la playa, los socorristas lanzaron un aviso al centro de coordinación de emergencias de SOS Deiak para informar de que habían avistado en el agua una pequeña embarcación en apuros.

El barco parecía hundirse con dos tripulantes a bordo por lo que de inmediato se puso en marcha la táctica operativa de salvamento y se movilizaron a diferentes servicios del sistema vasco de Emergencias, a fin de resolver la situación de peligro con la mayor celeridad posible.

Poco después, agentes de la Ertzaintza y Policía municipal informaron también al centro de control de que una zona del arenal presentaba «suciedad con manchas importantes» que, más tarde, desde el Servicio de Salud Pública identificaron como «un vertido de hidrocarburo» ficticio, eso sí.

Con el objetivo de atender ambas emergencias se estableció un puesto de mando avanzado a la estación de socorro de la playa bakiotarra. El helicóptero de la Ertzaintza, apoyado desde el agua por una unidad de Vigilancia y Rescate y desde el aire por un dron que realizó un vuelo a la zona, consiguió rescatar con éxito a uno de los tripulantes, que fue trasladado a una campa cercana a la playa para recibir atención sanitaria.

Efectivos de la Cruz Roja, por su parte, se encargaron de poner a salvo al otro tripulante que se encontraba en peligro. Una vez trasladado a la orilla le realizaron maniobras de resucitación sin que, curiosamente, pareciera que la emergencia causara mayor sorpresa entre los bañistas que se encontraban a su alrededor.

Entre tanto, los socorristas y hondartzainas procedían a balizar la zona en riesgo por contaminación para su posterior retirada, aunque antes se llevó a cabo la valoración de sus características y posible afección.