Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
Por tercer año consecutivo, el Departamento de Educación no ha sido capaz de adjudicar en tiempo y forma las rutas de autobús que dan servicio a los colegios públicos vascos. 131 de las 194 rutas de centros vizcaínos han quedado desiertas al no presentar oferta ... ninguna empresa. En estos momentos, 4.248 alumnos se quedarían sin autobús. En Álava se han quedado vacíos 35 lotes de 128 y en Gipuzkoa, 35 de 91. En total, se han logrado licitar poco más de la mitad de los 413 lotes. El plazo acabó esta semana. Éste será uno de los primeros problemas que se encuentre encima de la mesa el nuevo Ejecutivo de Imanol Pradales.
Noticia relacionada
Iñigo Fernández de Lucio
Es cierto que queda todo el verano por delante para tratar de enderezar el asunto, pero lo que estos datos ponen de manifiesto es que el conflicto del transporte escolar, que puso en jaque el inicio del curso actual, lejos de resolverse, va camino de enquistarse. Los últimos dos ejercicios dan fe de ello. En el curso 2022/23, los transportistas sólo accedieron a prestar el servicio tras arrancarle a Educación un acuerdo en la madrugada del día que empezaban las clases para aumentar el precio de los pliegos en un 24%, lo que permitió actualizar las tarifas tras varios años congeladas.
Sin embargo, lo más grave llegó en septiembre del año pasado. El departamento no consiguió adjudicar ninguna ruta de Bizkaia y casi ninguna en Álava. La consejería quiso obligar a las empresas que prestaron el servicio durante el curso anterior a prorrogar los contratos. Posteriormente se supo que el impulsor de esta idea fue un asesor del departamento que figuraba, a su vez, en el consejo de administración de una empresa guipuzcoana que sí se llevó varias adjudicaciones por valor de 4 millones de euros. El caso provocó un escándalo político y sólo la mayoría absoluta de PNV y PSE impidió que se abriera una comisión de investigación en el Parlamento vasco.
4.248 alumnos
vizcaínos estarían a día de hoy en riesgo de quedarse sin servicio de autobús.
20,2 millones
de euros ha destinado Educación a la licitación de las rutas, un 6% más que en 2023.
En cualquier caso, las empresas de transporte, en su mayoría pymes y autónomos, se negaron en redondo a acatar el trágala y Educación les denunció ante la Autoridad Vasca de la Competencia por conformar una suerte de cártel. El consejero, Jokin Bildarratz, les acusó en público de ponerse de acuerdo para dejar desiertas las licitaciones y forzar al Gobierno a negociar un aumento en los precios.
Bizkaia De las 194 rutas, sólo se han presentado ofertas a 63 (el 32,5%).
Álava De 128 lotes, 93 han recibido ofertas (el 72,7%) y otros 35 han quedado desiertos.
Gipuzkoa Educación sacó a concurso 91 rutas, de las que se han cubierto 56 (el 61,5%).
El pulso entre unos y otros dejó a 7.400 alumnos sin autobús durante dos semanas, lo que obligó al Ejecutivo autonómico a desembolsar un millón de euros para compensar a las familias que tuvieron que llevar a sus hijos en coche o, incluso, taxi durante esos días. La consejería y los empresarios firmaron la paz, aparentemente, al comprometerse Educación a negociar con ellos los pliegos de cara al nuevo curso. Fruto de ese diálogo, el Departamento aumentó un 6% el presupuesto destinado al transporte escolar hasta sobrepasar los 20 millones de euros.
A la vista está que esa cantidad no ha convencido a los transportistas. En Bizkaia, por ejemplo, apenas quince empresas -en su mayoría pymes- han presentado ofertas a 63 rutas, pero han quedado desiertas otras 131. A diferencia de Álava y Gipuzkoa, además, el proceso podría dilatarse. El Órgano Administrativo de Recursos Contractuales (OARC) ha admitido a trámite el recurso de una empresa que pedía suspender el proceso de adjudicación de los contratos. Ahora está analizando la cuestión y deberá decidir si el procedimiento continúa o no su curso. En los últimos tres años, el OARC ha recibido hasta 27 recursos contra los pliegos de contratación por parte de los transportistas y en todos los casos los ha acabado rechazando.
¿Por qué resulta tan difícil adjudicar las rutas? Hay varios factores, pero el origen del problema se remonta a 2021. Hasta entonces todo había funcionado bien, las empresas presentaban ofertas y competían entre sí para llevarse los contratos. Ese año el departamento cambió las condiciones del servicio de transporte escolar: régimen sancionador, limitaciones a los vehículos titulares y de reserva, exigencia de diversos cursos que debían abonar las empresas... Y, sobre todo, se establecieron unos precios base de licitación que los transportistas consideraban del todo insuficientes.
Hay que recordar que acababa de pasar lo peor de la pandemia. Era difícil encontrar determinadas piezas de recambio o, directamente, los propios autobuses, cuyo precio, por cierto, también se ha disparado. Y después vendría la invasión de Ucrania por parte de Rusia, que puso el diésel por las nubes, así como los neumáticos y todo en general. Si a ello se le une que hay escasez de conductores y que también se han actualizado al alza los convenios de los trabajadores del sector (el que tiene los sueldos más altos es el de Bizkaia), los transportistas aseguran estar en «la tormenta perfecta».
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
A la venta los vuelos de Santander a Ibiza, que aumentan este verano
El Diario Montañés
Estos son los mejores colegios de Valladolid
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Noticias recomendadas
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.