![Científicos estudiarán la conducta del tiburón en el Cantábrico](https://s3.ppllstatics.com/elcorreo/www/multimedia/2023/10/17/tagging_azti-kGG-U210451068712fVE-1200x840@El%20Correo.jpg)
![Científicos estudiarán la conducta del tiburón en el Cantábrico](https://s3.ppllstatics.com/elcorreo/www/multimedia/2023/10/17/tagging_azti-kGG-U210451068712fVE-1200x840@El%20Correo.jpg)
Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
«Que los tiburones sean eficientes cazadores no los hace ni malos ni peligrosos. De hecho, los humanos ni siquiera estamos en su menú», recalca la investigadora del centro tecnológico Azti y experta en gestión pesquera, Maite Erauskin-Extramiana, que participa en un proyecto para entender el comportamiento de esta especie en el Golfo de Vizcaya y evitar así interacciones no deseadas con prácticas marítimas, pesqueras y turísticas para lo que se han monitorizado 14 ejemplares.
«Hay que desmitificarlos y desterrar la imagen agresiva, de alimañas asesinas que nos han vendido, un estereotipo falso», recalca. La realidad, asegura, es la contraria, «tenemos que estar agradecidos de que frecuenten nuestra costa», ha añadido. De hecho, el litoral vasco es una zona de especial interés al avistarse gran cantidad de individuos jóvenes, como grabó hace unas semanas un submarinista del Lekeitioko Urpeko Taldea, Joseba Imaz, que interactuó con varios cazones al sumergirse en Ispaster.
Vulnerables
Para desterrar esa imagen negativa, durante los próximos seis meses científicos de Azti seguirán a siete ejemplares hembras y otros tantos machos de tintoretas sirviéndose de señales satelitales. «Es imprescinbible la colaboración del sector pesquero para que nos notifiquen los avistamientos de las piezas señalizadas», detalla Erauskin-Extramiana.
«Comprender sus rutas migratorias, comportamientos y hábitat nos permitirá desarrollar medidas de gestión dirigidas a reducir su mortalidad», recalca. En el caso de las poblaciones de tintorera y de dientuso que visitan en el Golfo de Vizcaya, están reguladas por la Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico (ICCAT).
La primera tiene establecidos máximos admisibles de captura o TACs mientras que el dientuso, por su mala situación, está sometido a una prohibición de retención a bordo. «Aunque se han implementado medidas de protección para otros depredadores marinos, como atunes y marlines, los tiburones no han recibido el mismo nivel de atención, lo que ha llevado a una disminución significativa en sus poblaciones», sostiene Erauskin-Extramiana.
El estudio de Azti cuenta con el apoyo y la financiación del Fondo Europeo Marítimo, de Pesca y de Acuicultura de la UE en colaboración con el Gobierno vasco.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Noticias recomendadas
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.