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Lo advertían todos los pronósticos: tanto la Agencia Vasca de Metereología (Euskalmet) como la estatal (Aemet) habían alertado de temperaturas muy elevadas para la época en la capital vizcaína, de hasta 33 y 34 grados, respectivamente, para la jornada de este miércoles. Por eso, en ... el centro de la ciudad predominaron las sandalias, los vestidos vaporosos, los pantalones finos y las mangas cortas. «¡Qué bochorno!» fue el comentario generalizado en las oficinas, bares y terrazas.
La sensación de calor se fue incrementando con el paso de las horas, empujada por el viento sur. Bien entrada la tarde, ha empezado a soplar cierta brisa reconfortante. Pero hasta la llegada de la vaguada de aire frío al anochecer, hasta la entrada de la galerna que produjo una caída drástica de las temperaturas, toda Bizkaia se asó de lo lindo.
El mercurio se alzó de forma espectacular en Sodupe pasado el mediodía, donde alcanzó los 34,6 grados. Mientras, en Sestao y en Arteaga se alcanzaron los 33,8 a las cinco menos diez de la tarde y a las cuatro y media. En Bilbao, el tope se registró en Zorroza: allí se llegó a los 30,7 por la mañana y a las cinco de la tarde, a los 33. Eso sí, los termómetros a pie de asfalto marcaron mucho más por el efecto de su exposición al sol. En práctica, el calor inusual afectó a todo el territorio.
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En la inmensa mayoría de las estaciones con las que cuenta Euskalmet - en concreto, en 27- se superaron los 30 grados. Aunque lo que se vivió a lo largo de la jornada solo fue un pequeño espejismo. Por la noche, el viento giró de forma brusca de oeste a este por todo el litoral y fuertes rachas frías obligaron a ponerse la chaqueta y doblegaron de nuevo los termómetros.
Este jueves, las máximas llegarán a los 26 grados en la capital vizcaína, según la previsión de Aemet. El viento será del sureste y podrá haber rachas fuertes. En la costa, soplará la brisa. Para el viernes la predicción es similar. El sábado, mientras, podrían llegar chubascos y tormentas por la tarde. Las máximas serán de 22 grados en Bilbao. Los meteorólogos dan por seguro que el domingo lloverá. Las posibilidades son de un 95%. La temperatura también caerá, pero no hará frío. Para la semana que viene, también hay vaticinios de tormentas.
Eso sí, las lluvias servirán para aliviar el caudal de los ríos. Algunos están mucho más secos de lo habitual, muy afectados por «el déficit de lluvias» que arrastran desde hace un año, agravado por la escasas precipitaciones del pasado mes. Y es que en abril ha llovido menos de la mitad de lo que se preveía para esa época del año. Sólo ha caído el 30% de la cantidad esperada en el oeste de Euskadi. Además, la insolación ha sido muy superior a la estimada: ha habido un 35% más de horas de sol: 186 en Bilbao, 193 en San Sebastián y 224 en Vitoria. También ha sido un mes cálido. Las temperaturas medias rondaron los 13 grados en el litoral, 1,7 más respecto al promedio normal entre 1981 y 2010. A pesar de ello, el día 5 se batieron algunos récords en un siglo por las temperaturas mínimas más bajas en algunas zonas montañosas de Bizkaia y de Álava.
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