Bizkaia, dispuesta a negociar «una solución» al tratamiento de las basuras de Gipuzkoa

«No sabemos en qué va a derivar todo este proceso, pero estamos dispuestos a la colaboración interinstitucional, en trabajar por una solución para el tratamiento de los residuos de Gipuzkoa sin perjudicar a Bizkaia y a un municipio del territorio», ha subrayado la responsable foral. A su juicio, todavía es pronto porque «no hay nada cerrado y ni siquiera sabemos si finalmente esos residuos van a venir a Bizkaia», pero en el que caso de que finalmente fuera así, ha apostado por analizar entre ambas instituciones todas las posibilidades existentes. Y entre ellas estaría incluso la posibilidad de tratar de forma transitoria en las propias instalaciones vizcaínas la basura guipuzcoana, según ha reconocido el propio alcalde de Mallabia, Igor Agirre. «La diputación de Gipuzkoa tiene en marcha procesos y licitaciones para contar con sus propias infraestructuras», ha remarcado la propia Unzueta, en referencia a la previsión inaugurar una incineradora en octubre de 2019.

La responsable vizcaína de Sostenibilidad ha apuntado que, en cualquier caso, el depósito de 120.000 toneladas de basura del territorio vecino en Mallabia es una posibilidad que se antoja lejana, incluso si la propia diputación guipuzcoana adjudica finalmente el contrato a la firma de Mallabia. «Si esta empresa cumpliese los requisitos, debería superar muchos trámites antes de poder funcionar», ha remarcado. Primero, la realización de un «estudio de impacto medioambiental», ya que el vertedero actual es de restos inertes industriales y pasaría a acoger residuos sólidos urbanos que generan gases y lixiviados.

Este cambio de la principal actividad de los terrenos, que deberían adaptar notablemente sus instalaciones para funcionar con todas las garantías exigibles en Bizkaia, inluye también la intervención de la viceconsejería de Medio Ambiente del Gobierno vasco, que debe realizar una nueva autorización ambiental integrada, «ya que la que actualmente tiene la empresa sufriría una modificación sustancial». Y, además de todos estos obstáculos, Unzueta ha recordado que la adjudicataria del contrato necesitará obtener numerosos permisos de un Ayuntamiento que se ha mostrado frontalmente en contra de albergar en su término municipal residuos procedentes de Gipuzkoa.

Una de las instalaciones a las que podría llegar esta basura es la planta de Tratamiento Mecánico Biológico ubicada en el monte Arraiz de Bilbao y que desde hace un mes vuelve a ser objeto de numerosos análisis tras conocerse la posibilidad de un nuevo brote de fiebre Q provocada por la inhalación de bacterias procedentes de restos de animales. Osalan investiga lo ocurrido y tiene en observación a cuatro trabajadores, aunque los análisis todavía no han confirmado si están realmente afectados.

La Diputada de Sostenibilidad y Medio Natural también ha dado cuenta en comisión del estado de las investigaciones y ha aprovechado para remarcar que tanto su departamento como Garbiker, sociedad foral dependiente de la institución foral, han estado encima de lo ocurrido «desde el minuto 1». además, aunque todavía no se ha detectado el origen del posible brote, Elena Unzueta ha recordado que la planta está sometida a una doble inspección semanal: «Una del cumplimiento de las condiciones del contrato y otra por parte de una empresa de prevención externa que analiza el grado de higiene y mantenimiento de las instalaciones. En ese sentido, ha reconocido que los informes de esta compañía coinciden en «insistir en la necesidad de acometer mejoras en la limpieza».

Esta reiteración en las conclusiones llevó a la diputación a encargar el pasado septiember «un informe pericial del estado de la planta». Su valoración fue de 3,6 sobre 5, «un aprobado pero con muchas posibilidades de mejora». En ese sentido, la responsable foral ha remarcado que, tras el brote también de fiebre Q que afectó a la TMB en el primer trimestre de 2014, «la planta ha sido dotada del protocolo de prevención más restrictivo de Europa, por lo que un nuevo caso no debería darse y, de ser así y en base a los resultados, desde la diputación actuaremos en consecuencia», en referencia a posibles medidas contra la adjudicataria.

En ese sentido, ha adelantado que solicitará una visita al interior de las instalaciones, «a las que intento entrar desde hace tres años». La UTE dice que es imposible «precisamente porque se aplican las máximas medidas de seguridad»