«Las setas con dudas no se comen»

Yolanda Díez, concejala de Salud y Consumo, ha recordado que «se trata de un servicio gratuito que abrimos en cada temporada. La principal novedad esta vez es que hemos cambiado la ubicación». Ahora atiende en el Centro de Castaños, en la calle Castaños número 11. «El horario de atención es de 09.30 a 13.30, los días 13, 18 y 25 de octubre, y 2, 8, 15, 22 y 29 de noviembre».

Tal y como ha explicado la edil, este servicio «es muy apreciado por la comunidad aficionada a la recogida de setas y hongos». El año pasado, «a pesar de las restricciones obligadas por la pandemia, atendió 165 consultas de 56 personas, mientras que en 2019 se resolvieron 256 consultas micológicas y se recibieron a 119 personas». Este miércoles, en el primer día de apertura del servicio y en el intervalo previo a su presentación oficial, a las 11.00 horas, ya habían pasado media docena de aficionados para identificar algunos ejemplares que habían recogido este fin de semana.

Chirapozu ha recordado que «por desgracia, en nuestro entorno tenemos todas las especies tóxicas que hay en Europa». Todos los años «sale la 'Amanita phalloides', es muy frecuente y muy común en nuestros bosques. Pero además no es una seta desagradable: es una seta bonita, no huele mal, ni sabe mal». Su buen aspecto puede causar una confusión fatal: «Su consumo trae consecuencias graves y a veces mortales».

Los aficionados «no siempre van con la preparación adecuada», advierte el experto. «Por ahí viene la causa principal de las intoxicaciones. La gente a veces tira de manual, o de una consulta rápida en internet, y se confía. Pero con una sola fotografía, o con la información que se saca de internet, si no tienes una experiencia previa de recolección, de haber cogido la seta, olerla, tocarla, la identificación es muy difícil».

Si no se sabe a ciencia cierta qué es lo que se ha recogido, «lo correcto es no consumir», resume Chirapozu. En cuanto a la consulta, «lo ideal es que acuda a este servicio la persona que ha recolectado los ejemplares, para que pueda aportar datos sobre el hábitat y el entorno» donde los ha encontrado. También es aconsejable traer varios ejemplares de cada especie recolectada, «desenterrados con el pie completo y sin cortar».

El Área de Salud recomienda recolectar solo ejemplares desarrollados y sanos, «sin agusanar». También es preferible realizar la consulta de identificación cuanto antes, «como máximo dos días después» y guardar los ejemplares fuera de bolsas de plástico, lo más extendidos que sea posible y en la parte baja del frigorífico, «cubiertos con un trapo limpio y seco». No se deben lavar ni congelar «los ejemplares antes de su identificación, ya que pierden gran parte de su color y su aroma natural. Tampoco mezclar distintas clases de setas en el mismo recipiente». Y en todo caso, si después del consumo se da el más «mínimo indicio de malestar, hay que acudir a los servicios médicos de urgencias».