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En Bilbao hay más de 700 personas sin hogar. La villa cuenta con 392 plazas de alojamiento nocturno en más de una decena de recursos para evitar que pernocten en las calles. Y las asociaciones, que también disponen de más plazas a través de financiación ... privada, son un pilar en la gestión de albergues y pisos. La pandemia puso de relieve la necesidad de impulsar nuevas dotaciones al constatarse que el número de personas sin techo superaba las estimaciones. La escasez de recursos en otras localidades de Bizkaia traslada el peso del acogimiento nocturno a la capital, con listas de espera de hasta 200 personas. El Ayuntamiento, para facilitar la labor de los colectivos sociales, ha aprobado nuevas subvenciones, por 389.000 euros, dirigidas a financiar el alojamiento a quienes viven en la calle.
El Pleno ha aprobado una modificación de crédito por valor de 113.000 euros para Claret Sozial Fondoa, que se suman a la ayuda de 103.000 euros para esta fundación recogido en el Presupuesto Municipal. Asimismo, se ha dado luz verde a una subvención a Agiantza Elkartea de 276.000 euros. Estas nuevas aportaciones complementan las ya recogidas en las cuentas de 2022, que contemplan, en el ámbito del alojamiento de personas sin hogar, 188.250 euros para Cruz Roja, 113.300 para Cáritas y otros 164.000 para Lagun Artean.
Dotar de un techo a estas personas no es la única medida aprobada en el marco de la ampliación de subvenciones para ayudar a las personas con dificultades. El Pleno ha dado luz verde a sendas ayudas dirigidas a facilitar alojamiento e intervención socioeducativa a familias con menores a su cargo, una de 234.100 a Gaztaroa-Sartu, que ya cuenta con otra aportación de 90.000 euros, y de 56.100 a Lagun Artean.
La asociación Askabide, que cuenta con una subvención de 74.160 euros, percibirá otros 16.000 euros para mantener el centro de acogida para la inclusión de personas que ejercen o han ejercido la prostitución, un colectivo vulnerable con la que el colectivo trabaja desde hace más de dos décadas.
El trámite para sacar adelante estas propuestas ha sido rápido, sin debate, a excepción de los 50.000 euros que que percibirá la cooperativa Peñascal con destino a cursos de euskera para inmigrantes. «¿Creen que la inmensa mayoría de migrantes, como por ejemplo los de ucrania, lo que más necesitan son cursos de euskera cuando lo hablamos el 3,5% de los bilbaínos?», ha lanzado el edil popular Carlos García, que ha emplazado a que el Gobierno local «compense» la «reducción del 10%» que ha sufrido la fundación Peñascal «en los últimos tres años para su labor asistencial con jóvenes en exclusión, que es ejemplar».
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