El Banco de Alimentos llama a la solidaridad en su Gran Recogida: «Nuestros almacenes están vacíos»

El perfil es el de familias monoparentales, inmigrantes o trabajadores en ERE o en situación de precariedad que no pueden acceder a la prestación. Durante el viernes y el sábado, más de 5.000 voluntarios volverán a los supermercados y grandes superficies comerciales para orientar y motivar a sus clientes para que colaboren con esta actividad solidaria, que se lleva a cabo desde 1995. Jugadores y jugadoras del Athletic participarán en algunos supermercados. Como el año pasado, se les podrán entregar productos no perecederos – por ejemplo, leche, galletas, pasta, arroz, legumbres, y aceite– una opción disponible solo en algunas entidades, como en Eroski o BM, o comprar en caja unos bonos que la entidad canjeará por comida cuando se necesite. Crovetto expuso que «a lo largo del año 2022 se ha producido la paradoja de que habiendo recibido más donativos que nunca, pero hemos tenido que reducir la dieta básica que entregamos, debido a la inflación; de hecho, si la 'Gran Recogida' siempre ha sido fundamental para renovar los alimentos que entregamos, este año la necesidad es más acuciante porque estamos terminando el año con los almacenes prácticamente vacíos».

Por ejemplo, la entidad ha dejado de repartir acete de oliva prácticamente desde que arrancara el año y reducido de 6 a 4 el número de litros de leche que se entrega. La entidad reparte una cesta básica con este producto, pasta, arroz, azúcar y desde hace tres años también congelados (pollo, croquetas y empanadillas), además de fruta y verdura. El Banco de Alimentos espera igualar la cantidad recogida –o bien a través de donaciones directas o a través de los bonos– a la del año pasado: 1,200.000 kilos. El 25% de lo que se reparte a lo largo del año gracias a la colaboración de 250 entidades por todo el territorio. El resto se logra a través de otra campaña en mayo y de donaciones de empresas, particulares e instituciones. Por ejemplo, el Banco recibe cada día donaciones 'de último minuto' que se reparten casi de forma instantánea, con productos incautados o a punto de caducar. En Bilbao, el reparto se realiza junto a la Cruz Roja en los locales denominados Lagun Guneak. El primero se inauguró en 2018 en Santutxu y en breve, se estrenará otro local en Basurto.