Luis Ángel Gómez

El Ayuntamiento sacará adelante sus nuevos impuestos tras rechazar las 49 alegaciones de la oposición

El equipo de gobierno se reafirma en el callejero fiscal que reduce las zonas de siete a cinco

Miércoles, 19 de junio 2024, 13:40

En el pleno municipal de este mes de junio, que se celebrará el próximo jueves, el Ayuntamiento de Bilbao va a aprobar las nuevas ordenanzas fiscales. Esta vez llegan muchos cambios, que además son sustanciales. Los partidos de la oposición (EH Bildu, PP y Elkarrekin) ... han presentado casi medio centenar de alegaciones (49), pero ninguna de ellas ha sido asumida por el equipo de gobierno PNV-PSE. Así que la nueva regulación saldrá adelante en los términos anunciados por la concejala de Hacienda, Marta Ajuria, hace un mes.

Publicidad

¿Qué es lo que viene? Lo más llamativo son los cambios en el callejero fiscal (la categorización de calles que determina el importe de varios tributos) y la actualización de los valores catastrales por parte de la Diputación (que también se utiliza como base para varios cálculos fiscales). Ambas cuestiones van a impactar en los bolsillos de los bilbaínos, pero de manera desigual. Por ejemplo, buena parte de las calles de Abando e Indautxu pasan a ser de primera categoría (ahora sólo lo es la Gran Vía), con lo que pagarán más en la tasa de recogida de basuras y el Impuesto de Actividades Económicas (IAE). Mientras, otras zonas, como Campo Volantín, descienden de categoría y pagarán menos. La cuestión es que se pasa de las siete categorías actuales, a sólo cinco.

Buena parte de las alegaciones de la oposición tenían que ver con esto, con el hecho de que reducir el número de 'escalones' suponía una merma de la progresividad. Sobre todo, para las zonas más pobres, que son las afectadas por la pérdida de las categorías seis y siete, pasando todas a la cinco. En la comisión municipal en el que se preparan los asuntos del pleno que ha tenido lugar este miércoles Ajuria ha alegado que la decisión tiene que ver con tener un sistema homogéneo, porque mantener tan fragmentada la parte baja de la tabla implicaba, por ejemplo, que portales colindantes tuviesen una categoría diferente, lo que iría contra la justicia tributaria.

En las nuevas ordenanzas, como norma, van a aumentar los tributos referenciados al valor catastral, de los que el principal es el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), muy importante para las arcas municipales porque este año aportará 60 millones (sobre una recaudación total, recordemos, de 191); también el de plusvalía (7,5 millones) y la tasa de alcantarillado (8,4). Por otra parte, también quedarán afectados los que dependan para su cálculo de la categoría fiscal de las calles (que pasa de siete a cinco categorías), que son la tasa de basuras (24,5 millones generará este ejercicio), el IAE (14), la tasa por utilización privativa del espacio público (20) y la de aperturas. En total, los ingresos municipales aumentarán un 1,7%, lo que supondrá ingresar 3,4 millones de euros más en 2025.

Publicidad

Por otra parte, en el pleno del próximo jueves también se va a aprobar la modificación del Plan Especial de Ordenación Urbana para la ordenación de la Facultad de Medicina y Enfermería de la UPV/EHU. Se trata de cambios menores: Osakidetza ha decidido que quiere techos más altos pero, al tener que mantener la altura de los edificios, pasará de seis a cinco plantas; también habrá un cambio en el aprovechamiento del bajocubierta, y más espacio en las plantas subterráneas.

En el turno vecinal, el Movimiento de Pensionistas de Bizkaia pide garantizar la accesibilidad a los trenes de la línea Orduña-Bilbao. Se trata de una iniciativa que se ha presentado, o se presentará, en los distintos municipios por donde pasa este servicio, y lo que reclama es que al menos uno de los vagones esté preparado para que pueda acceder de manera independiente una persona, por ejemplo, en silla de ruedas.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Accede todo un mes por solo 0,99€

Publicidad