Viernes, 13 de mayo 2022, 10:40
El pleno del Ayuntamiento de Alonsotegi aprobó este viernes una iniciativa que insta al abogado contratado por el Consistorio a que solicite la celebración de juicio contra el exalcalde José Luis Erezuma (regidor entre 2011 y 2015 tras ganar las elecciones con la plancha del ... PNV) por delitos de corrupción. De esta forma, el Consistorio reacciona y sigue adelante con el proceso judicial después de que la otra parte haya roto el preacuerdo alcanzado con Erezuma y otros cuatro acusados para declararse culpables y pagar el dinero supuestamente desviado, evitando así su entrada en prisión.
Publicidad
La decisión se tomó por unanimidad y, si no hay novedades, supone sentar en el banquillo al exprimer edil, un arquitecto, dos constructores y una técnico. Las tres formaciones con representación municipal, PNV, PSE y EH Bildu (que fue el grupo que destapó este caso y el que había solicitado la celebración del pleno extraordinario) dieron su visto bueno ante el impago por parte de los procesados de las cantidades que habían sido pactadas para restituir el daño patrimonial sufrido por el Consistorio y la Diputación.
Hay que recordar que el 17 de enero, un día antes de la celebración del juicio, los cinco acusados aceptaron declararse culpables de los delitos de fraude en subvenciones públicas, malversación, falsedad y prevaricación. Se comprometían a devolver una cantidad cercana a los 850.000 euros (incluyendo intereses). De esta forma serían condenados a penas máximas de 2 años con lo que evitaban su ingreso en la cárcel. En estos meses no se ha concretado el calendario de pagos ni se ha hecho ninguna entrega efectiva.
El caso se remonta a 2011. El Ayuntamiento debía una fuerte cantidad de dinero a los constructores implicados por un proyecto previo. Así que, según la Fiscalía, los acusados urdieron una trama para hacerse con el dinero solicitando subvenciones (600.000 euros a la Diputación, más otros 81.392 que salieron de las arcas del Consistorio).
Publicidad
Aprovecharon unas lluvias torrenciales que se produjeron entre el 4 y 6 de noviembre para pedir ayuda y reparar supuestamente tres instalaciones (los bajos de la casa consistorial, el ambulatorio y un muro en la carretera general). El fiscal, que pedía seis años de cárcel por los delitos de fraude en subvenciones públicas, malversación, falsedad y prevaricación, considera que tales obras no eran necesarias y tampoco se llegaron a ejecutar. En cambio, sí se prepararon informes municipales para justificar su necesidad y para intentar acreditar que habían sido presuntamente realizadas. Estos documentos, redactados o revisados por dos arquitectos y una asesora, serían falsos y se habrían elaborado para dar apariencia de legalidad a la operación. Las obras se adjudicaron por la vía de urgencia, sin procedimiento de contratación.
Accede todo un mes por solo 0,99€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.