El aeropuerto se cierra 12 días a vuelos privados por la cumbre europea del lunes

La decisión de vetar la parada y pernocta de aviones no comerciales tiene que ver con una cuestión de seguridad y, sobre todo, con la necesidad de buscar el espacio necesario para poder albergar, llegado el caso, a cerca de una treintena de aparatos y vuelos de Estado. 'La Paloma' se va a convertir en un hervidero de 'pájaros' que traerán a los ministros y sus equipos de trabajo. Muchos de los aviones aterrizarán para dejar su pasaje y se marcharán poco después. Pero habrá un número apreciable de ellos que es muy posible que se queden varias horas e incluso dormirán en las pistas del Txorierri.

¿Pero por qué se cierra 12 días, si realmente el evento solo dura dos jornadas? La respuesta está en que Bilbao ha de estar «preparado» también hoy y mañana, así como el 27 y el 28 porque hay otras dos reuniones de alto nivel en Logroño y Santander, con motivo de la Presidencia española de la Unión Europea. La idea es que, si hay algún tipo de problema en los campos de vuelos cántabros o riojanos, haya la posibilidad de recurrir a Loiu. La organización de todo este operativo corre a cargo de la Oficina de la Presidencia de España en la UE.

La clausura temporal de las instalaciones a este tipo de tráfico ha sorprendido al sector. Hay empresas de aerotaxi que vuelan habitualmente a Bilbao que reconocen que han tenido que cancelar varios servicios «solicitados por ejecutivos y algún deportista» que venían a Bizkaia en estas fechas. Es la cara negativa de esta situación, que también tiene un lado positivo: estas mismas compañías admiten que han firmado varios contratos para mover a personal que asistirá a la cumbre con sede en Bizkaia.

Las operaciones de la aviación general se han disparado en 'La Paloma' tras la pandemia. En 2022 hubo un llamativo auge. Se ha pasado de 677 despegues y aterrizajes en 2019 a 1.276, lo que implica cerca de cuatro movimientos diarios de media. Casi el doble que antes del virus.

Las restricciones se han publicado en el 'Notam' del aeropuerto. Este es un teletipo muy esquemático que se distribuye a las empresas y pilotos para que conozcan todos los aspectos que pueden afectar a su operativa. El aviso es claro: no se admiten operaciones para recalar en Loiu más allá de la toma y despegue inmediato entre el 19 y el 30 de julio. No obstante, ayer, en el primer día de la limitación, hubo cierta flexibilidad en su aplicación. Lo normal es que el procedimiento se vaya endureciendo a medida que se acerque la cumbre del lunes y martes.

En estos días se espera en 'La Paloma' un trasiego de jets importante, aunque posiblemente los aparatos que visiten Loiu sean más austeros (habrá mucho avión de Estado, similar a los Falcon españoles) que los que vinieron a Bizkaia en octubre pasado, con motivo del 25 aniversario del museo Guggenheim.