«Bilbao es el sitio perfecto para saltar»

Duque deja la competición a los 45, una edad de retiro que ya había contemplado hace unos años, pero que ha sido una elección forzosa «porque el año pasado tuve un par de lesiones y fue un poquito difícil recuperarme. Este año he competido como invitado. El rendimiento no ha sido el mismo». Duque tiene claro es que deja los campeonatos «pero voy a seguir saltando. Este año voy a estar en Chile, iré a Sri Lanka, voy a seguir buscando cosas en mi país, Colombia, y África es un continente que me queda por explorar».

El campeón colombiano se plantea nuevos retos aunque no los puede revelar. «Son secretos». ¿Alguna pista de a qué tipo de desafío se refiere? «Bueno, hace un año y medio salté en la Antártida, un sueño de hace 10 años» que le ha convertido en el único atleta que ha hecho clavados de altura en los 6 continentes. «Este mundo está lleno de sitios espectaculares para saltar», asegura. Y Bilbao es uno de ellos. «Es muy buen sitio. Ya nos conocen, somos 'los de los saltos', y para nosotros es emocionante venir. Y luego el lugar, el puente, con el museo aquí, es el sitio perfecto para saltar en una ciudad». Duque responde sonriendo a la pregunta que los clavadistas oyen todo el rato. ¿Qué siente en la plataforma, a 27 metros de altura? «¡Miedo! Es inevitable. No es terror, algo que te para ahí, pero sí un mecanismo de defensa que te dice 'cuidado' y te recuerda qué es lo que tienes que hacer. Es una sensación que me gusta. No te hace sentirte confiado».