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«Estoy encantado de poder estar otra vez al frente del Ayuntamiento y al servicio de Bilbao». El alcalde, Juan Mari Aburto, se ha reincorporado ... hoy a la actividad municipal tras casi dos meses de baja por una operación de cadera y ha querido divulgar el momento del regreso en un vídeo. En él se le ve saludar a sus secretarias y entrar en su despacho ayudándose de una muleta. «Ya estamos otra vez aquí, en mi mesa, con mis cosas, con las cosas de Bilbao. No he dejado de estar porque he estado con el ordenador, con el teléfono, con la gente, pendiente de todo, pero estar aquí es otra cosa».
Ya la pasada semana, el jueves, el primer edil había anunciado su regreso inminente en un vídeo colgado en redes sociales. «Estoy en pleno proceso rehabilitador. Han sido unas semanas complicadas pero esto ya apunta hacia el final, se ve ya la luz. En breve me tendréis ya a vuestro servicio», dijo entonces. Y el momento ha llegado.
Aburto fue intervenido el 23 de enero para tratar de mitigar el dolor que venía sufriendo desde que se operó anteriormente de la cadera, en 2020. En concreto, la última intervención consistió en actuar en los músculos que rodean al hueso ya que, según él mismo reveló hace casi dos meses, «llevo demasiado tiempo con mucho dolor al andar y con importantes dificultades para moverme bien». En aquel momento, a principios de año, avisaba de que la operación implicaría estar en reposo «absoluto» durante algunas semanas. Desde entonces y hasta hoy, las funciones de máxima representación institucional en la ciudad le correspondieron a la primera teniente de alcalde y concejala de Seguridad Ciudadana, Amaia Arregi.
Fue en noviembre de 2020 cuando el alcalde tuvo la intervención en la que se le implantó la prótesis de cadera, tras dos años de molestias y después de posponerla durante meses con el fin de no interferir en la gestión de un momento tan delicado como fue la pandemia. Hay que recordar que Aburto formaba parte del LABI, el comité encargado de determinar las medidas contra el covid. En aquella ocasión la baja del alcalde se prolongó durante un mes. Cuatro meses después también pasó un tiempo alejado presencialmente de la actividad municipal cuando se le intervino para tratar un tumor en el duodeno detectado en una revisión rutinaria.
En esta ocasión el tiempo de recuperación fue algo más extenso debido a la complejidad del paso por el quirófano. En todo caso, se confirma que va a estar en condiciones de recibir al Athletic en el Ayuntamiento cuando, si las cosas evolucionan como todo el mundo espera, el equipo regrese a la ciudad con la Copa.
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