53.000 vehículos sufrirán a diario durante año y medio las obras en los accesos a Megapark

La institución foral invertirá más de 4,1 millones de euros en la mejora del enlace de la A-8 con la BI-644 en los términos municipales de Barakaldo y Trapagaran. Unos 600 metros lineales de carretera que se verán afectados por las obras en el tramo que discurre desde la rotonda de Kareaga -en la N-634, a la altura de Max Center- hasta la de la ciudad del transporte Aparkabisa, por la que acceden los vehículos procedentes de la autopista para entrar en Megapark. Los accidentes en el entorno resultan frecuentes, debido tanto «a las elevadas intensidades de tráfico que se registran en horas punta, como por los trazados inadecuados» que presenta la glorieta en sus conexiones, según exponen los técnicos de la Administración. Razón por la que era preciso intervenir.

Tampoco la situación es mucho mejor en los ramales de conexión de la carretera BI-644 con la autopista. En el de sentido Santander, porque presenta una cuña de incorporación «muy reducida», lo que impide una correcta adecuación de la velocidad de los vehículos que van a entrar a la calzada. Y en sentido Bilbao, porque el enlace soporta una curva de radio muy pequeña «con deficiencias en su peraltado» y una apertura a dos carriles donde los conductores pisan un terreno que está abonado a los siniestros.

El último foco de problemas se sitúa en la conexión desde la A-8 con la BI-644 en dirección Cantabria, ya que sirve también como enlace con otro centro comercial enclavado en la zona desde 1994, Max Center, la mayor zona de ocio y restauración de Bizkaia. Se trata de un trazado de curvas reducidas, apenas sin peralte, con una anchura de carriles que resulta insuficiente.

Para corregir estas deficiencias, el departamento foral de Infraestructuras y Desarrollo Territorial contempla varias actuaciones. La primera, la «rectificación» de la carretera en su alzado y planta entre las rotondas de Kareaga y Aparkabisa, lo que permitirá colocar una barrera de hormigón prefabricada en la mediana como medida de seguridad para evitar choques frontales.

Los cambios en el entorno de Aparkabisa no acabarán ahí, porque la Diputación contempla el traslado de la rotonda algo más de cuatro metros hacia Sestao. Eso sí, mantendrá sus actuales dimensiones: 42,60 metros de diámetro de isleta central, 71 en el exterior de la glorieta y una calzada de tres carriles de cuatro metros de ancho cada uno.

El proyecto también contempla la construcción de un ramal directo en voladizo de hormigón armado desde la A-8 hacia Megapark sobre el Castaños. Una obra que obligará a demoler parte de la acera existente en el puente sobre el río que permite el acceso al complejo comercial y a restituir algunos elementos, como la iluminación, las barandillas o la electricidad.

La intervención prevista por la institución foral en la zona de Kareaga, sobre la N-634, persigue un objetivo prioritario: acabar con las bolsas de agua que se generan con las lluvias y las mareas vivas. Para eso se instalará una nueva red de drenaje.