50.000 usuarios accedieron al archivo el pasado año

También creció el número de personas registradas, que ascendía ya a finales de 2023 a 25.297. «Solo es necesario registrarse para solicitar servicios, no para la consulta en la web y en el catálogo», precisa la responsable, Anabella Barroso, antes de destacar que, «desde el año 2000, se dan de alta una media de 850 usuarios anuales». Porque, aunque lleven un año largo con un sinfín de peticiones de partidas de bautismo antiguas para que los descendientes de los exiliados en la Guerra Civil y la dictadura puedan obtener la nacionalidad española, los vizcaínos utilizan el archivo también por otras razones.

Según Barroso, «la genealogía es una motivación muy importante; recibimos muchísimas peticiones». Por ejemplo, en 2023, emitieron copias literales de 870 partidas de bautismo de antepasados por el tema de la ciudadanía y 840 de personas que investigaban sus raíces. «Dimos prioridad a los trámites de nacionalidad, por lo que no se respondieron todas las de genealogía», expone.

Para comprobar el éxito que tiene la búsqueda de datos para completar el árbol familiar, basta con mirar los datos de 2022. Entonces, en un ejercicio en el que la Ley de Memoria Histórica estuvo en vigor apenas dos meses, las partidas de bautismo para obtener la ciudadanía tramitadas fueron apenas 129. Las relacionadas con la genealogía, 1.171. También hubo 32 vinculadas a herencias y testamentos.