El edificio sostenible más alto del mundo está en Bilbao

La torre de 28 alturas que levanta la sociedad pública Visesa en el barrio bilbaíno de Bolueta será el edificio sostenible más alto del mundo. Sus 88 metros superarán en cinco a otro bloque residencial que se está construyendo en la isla de Roosevelt, en Nueva York, según los mismos criterios de alta eficiencia energética y climatización que permiten obtener el certificado Passivhaus Institut de Darmstad (Alemania), el más prestigioso a nivel internacional. El consejero de Vivienda del Gobierno vasco, Iñaki Arriola, ha visitado esta miércoles el inmueble de 171 pisos, de los que 108 son de protección oficial en venta y 63 sociales.

El proyecto incluye elementos innovadores que garantizarán que el edificio garantice un consumo energético «casi nulo». El resultado, según ha asegurado el mandatario socialista, ha sido un edificio prácticamente «hermético» que permite reducir «hasta un 75%» la demanda de climatización gracias al empleo de aislamientos térmicos especiales, carpinterías de altas prestaciones y ventilación mecánica de doble flujo con recuperación de calor de elevada eficacia.

De hecho, cada piso tendrá un sistema propio de renovación del aire que hará «innecesario» abrir las ventanas para ventilar, y garantizará al mismo tiempo «cero olores y cero polvo». Además, se va a distinguir por un alto confort acústico y térmico, la calidad del aire interior y el uso de materiales naturales. La torre de Bolueta, que ya cuenta también con la calificación Best Practice del concurso internacional de buenas prácticas de Naciones Unidas, desarrollado en colaboración con el estudio de arquitectura Varquitectos y la constructora Sukia, se va a distinguir por un alto confort acústico y térmico, la calidad del aire interior y el uso de materiales naturales.

Innovación en una vivienda pública

Arriola ha remarcado la importancia de desarrollar un proyecto energético de estas características en una promoción pública. «Las viviendas que el Gobierno vasco pone a disposición de las personas con menos recursos no solo son de una calidad equiparable a las de precio libre, sino que en ocasiones la superan en innovación y avances constructivos», ha destacado. «El esfuerzo por levantar un edificio de consumo energético casi nulo y lograr que los gastos derivados de vivir en él sean lo más ajustados posible cobra todo el sentido cuando se realiza en viviendas sociales y de protección oficial», ha añadido.

A este primer bloque se va a sumar en breve una segunda torre residencial de 22 alturas que Visesa va a empezar a construir en la parcela contigua, compuesta por 190 viviendas de protección oficial para venta. Este es el segundo concurso público que convoca la sociedad pública a con esta promoción, ya que la anterior se acabó anulando por falta de personas interesadas en adquirir las viviendas en régimen tasado, razón por la que la consejería dirigida por Iñaki Arriola ha visto conveniente rebajar su calificación y el precio final de compra en unos 10.000 euros por piso para incentivar su venta.

El consejero socialista ha querido también destacar la singularidad del proyecto de Bolueta, ya que el edificio que levanta Visesa (en colaboración con el estudio de arquitectura Varquitectos y la constructora Sukia) es el primero de un total de siete bloques que van a albergar en esta zona de Bilbao 1.100 viviendas (608 de protección oficial y 492 libres) y se encuadra dentro de una compleja y ambiciosa intervención urbanística. La operación está modificando por completo la fisonomía de la zona con el objetivo de recuperar para la ciudadanía un espacio industrial en desuso y degradado, integrándolo en la trama urbana, social y ambiental de la villa y dando un gran protagonismo a la ribera del río Ibaizabal como elemento articulador del territorio.