Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
maika salguero
Jueves, 7 de enero 2016, 18:55
El choque de dos camiones en la bajada del puerto de Autzagane dejó ayer atrapados a sus conductores, que vivieron desde la cabina, conscientes en todo momento, una larga y angustiosa operación de rescate. Los equipos de emergencia tuvieron que emplearse a fondo y extremar ... las precauciones en una maniobra de alto riesgo, ya que tras la colisión y el vuelco la cabina de uno de los trailers quedó suspendida sobre las vías del tren. El accidente ocurrió pasadas las seis de la tarde y obligó a cortar la carretera, tanto en sentido Amorebieta como hacia Gernika, durante toda la tarde, la noche y parte de la madrugada.
Al cierre de esta edición se desconocía el alcance de las lesiones de los dos transportistas, que chocaron en la BI-635, a la altura de Muxika, en la bajada del puerto de Autzagane, un punto negro de las carreteras vizcaínas. Tras la colisión frontolateral, cuyas causas se desconocen, ambos vehículos pesados volcaron con tan mala fortuna que uno de ellos quedó suspendido sobre el trazado ferroviario de la línea que enlaza Bilbao y Bermeo. Los bomberos tuvieron que sujetarlo con cables de acero y proceder muy despacio en las maniobras de desencarcelación, que movilizaron un amplio dispositivo de emergencia. Acudieron cuatro o cinco dotaciones de los parques de Gernika y Durango con el apoyo de cuatro grúas, mientras las ambulancias esperaban su turno sobre la carretera mojada.
«Esta zona tiene mucho peligro, en cuanto caen cuatro gotas...», comentaban algunos de los conductores que formaban colas kilométricas en ambos sentidos. A última hora de la tarde, los atascos habían remitido y la Ertzaintza desviaba el tráfico procedente de Durango por Montecalvo y el que llegaba desde Muxika hacia Bilbao por Morga. Los dos camioneros fueron finalmente rescatados en torno a las nueve de la noche, después de tres horas, y evacuados a los hospitales de Cruces y Galdakao, según informó el servicio de Emergencias 112.
El de Autzagane fue el siniestro más grave de una jornada en la que la lluvia y el aumento de actividad tras las fiestas navideñas complicaron el tráfico. Sobre la una y diez de la tarde, una furgoneta volcó en la N-633, en sentido hacia el aeropuerto. Un vecino de Mungia de 37 años y dos niños, de 21 meses y 9 años, resultaron heridos leves.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.