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Imaginarse a un jugador de baloncesto de 22 años confinado en casa, solo, anima a pensar en alguien que se sube por las paredes. No es el caso de Tomeu Rigo, el escolta balear del RETAbet Bilbao Basket. A diferencia de otros compañeros su aislamiento ... es total. Está solo y decir que encantado es pasarse. Pero no le agrava la situación demasiado estar sin compañía.
- Llama la atención que un joven de 22 años esté bien solo.
- Tiene su explicación. Llevo fuera desde los catorce años y eso influye. Estoy acostumbrado a vivir un poco solo porque la vida que he llevado te hace espabilar antes. Tener compañía está bien, pero no lo paso mal estando solo.
- En su Instagram aparece el mar por todas partes.
- Si estuviera en Mallorca en mi casa de verano estaría diferente, pero no puedo hacerlo. Me gusta el mar, he nacido en la costa, y aquí cuando puedo me escapo a Sopela o alguna playa de estas cuando tenemos una tarde libre.
- ¿Qué es lo primero que hará en cuanto podamos salir de casa? Y no sirve la manida borrachera porque debe dar ejemplo.
- Lo puedo hacer a escondidas (ríe). Ya que estoy aquí y hago lo que me gusta que es jugar a basket y con lo bien y rodado que iba todo, tengo ganas de volver a engrasarnos como equipo para volver a jugar y acabar la liga.
- ¿Se sigue notando la química del equipo también en este aislamiento?
- El año pasado ya hubo un grupo y al seguir cuatro o cinco ha hecho que ruede todo más rápido y los que han venido han aportado como personas. Somos un equipo humilde y esto marca la diferencia.
- Algunos se siguen viendo las caras, aunque a cierta distancia.
- Sí, Thomas (Schreiner) y Q (Serron) viven aquí y cuando salimos a las ocho a aplaudir nos vemos y saludamos. Seis o siete vivimos en esta zona.
- ¿Cuantas veces ha salido a la calle?
- He salido al Mercadona. Otro día volví pero había una cola de un kilómetro y me fui al Eroski (ríe) y a tirar la basura.
- ¿Cuál es su rutina?
- Me levanto sobre las diez, pongo música que es lo primero que hago para espabilarme. Después desayuno, entrenamos a las once y media y me pegó una ducha y hago lo que tenga que hacer de compras, basura o universidad. Como y luego estoy más tranquilo para mis cosas salvo que tenga que hacer algún trabajo para la universidad.
- ¿Qué estudia?
- Turismo, a distancia. Compagino y cojo cinco o seis asignaturas por año, hago dos o tres cada 'cuatri' y poco a poco.
- ¿Algún secreto confesable durante el ocio?
- Estamos un poco viciados varios del equipo y yo y jugamos juntos a la Play. Estábamos un poco cansados del Fornite y dijeron que el juego de Fórmula 1 era gratis y lo cargamos todos y lo jugamos. También aprovecho para leer más, algo que antes sólo hacía en los viajes. Me falta el último de la trilogía de Falcó de Pérez Reverte.
- ¿Creo que se acerca sin miedo a los fogones?
- Hago Skype con mi madre para huir del arroz y pollo al que recurres cuando llegas cansado de entrenar. Compro lo que me dice, sigo su tutorial y más o menos me sale bien. El otro día hice una coca mallorquina, una base de pasta y encima le echas verduras, especias, al horno y acaba siendo más fácil de lo que parecía.
- ¿Para qué llega la jornada diaria de trabajo físico que hacen interconectados?
- Un poco para no oxidarnos. Y para soltar adrenalina y no subirte por las paredes.
- ¿Quedarán los cuerpos muy tocados por esta situación?
- Le costará a todo el mundo. Llevábamos un rodaje buscando la fase final de la temporada que habrá que recuperar.
- Qué pena, venía el equipo como un tiro y seguía carburando sin Bouteille.
- Nuestro fuerte es el grupo. En los momentos en que se necesita damos un paso adelante para arrimar el hombro y seguir con la misma mentalidad de creerte que puedes ganar.
- En lo personal usted estaba entrando más en juego.
- Después de la putada de pretemporada cuando me lesioné ellos llevaban una velocidad y ritmo más altos. Notaba que estaba mejorando mucho en los entrenos, aprovechando las oportunidades. Hay que estar a tope, para no lesionarte lo primero. Y tener la mente positiva para aprovechar lo que te llegue.
- ¿No merecería la pena dar por acabada la temporada?
- No lo sé. Los jugadores queremos acabarla. En verano hay vacaciones, quizá la gente no vaya a los partidos. Si se pudiera alargar hasta finales de junio creo que se podrá acabar.
- Hay quien aboga por cerrar la campaña regular así, que no haya ascensos ni descensos y que los actuales ocho mejor clasificados reanuden jugando los play-off.
- No estaría mal, pero hay que fijarse en los de LEB que han hecho un proyecto ambicioso para subir. Todo es una rueda.
- ¿Alguna challenge?
- Mi challenge es no hacer ningún challenge.
- ¿Cómo le ha sentado la marcha a Estados Unidos de Tyler Haws?
- Ha sido un poco raro. No nos hemos podido ver cara a cara en el vestuario y hablarlo, como pasa siempre cuando hay una marcha. Es como algo invisible. No lo esperábamos. Pero si te pones en su lugar, que ha venido al final de temporada para intentar ayudarnos, su familia no puede venir, dos niños pequeños, un terremoto. Es entendible. No me gustaría estar en su lugar.
- ¿A quién se habría llevado a casa durante el confinamiento?
- A lo mejor a mi madre (ríe), pero estoy bien así. Tengo mi Play, mis cosas, la universidad y me ocupo el tiempo.
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