Llega la hora de los veteranos en el Bilbao Basket

Para lograrlo, los hombres de negro deberan resetear, aprender de los fallos de los últimos encuentros y aplicar todo lo trabajado en los entrenamientos para afrontar una serie de jornadas muy importantes de cara al futuro. Tras la próxima salida a Burgos -una plaza muy complicada ante un rival crecido-, el Bilbao Basket afrontará choques directos contra Betis, UCAM, Estudiantes y Manresa, con el Barça intercalado. Tres de ellos, además, jugarán en Miribilla, así que es obligario sacar los partidos con éxito con una premisa, el paso adelante de todos y cada uno de los integrantes de la plantilla, pero en especial de los veteranos y jugadores con más experiencia en la ACB.

Hasta el momento, dos son los miembros con más peso a nivel estadístico en el grupo de Mumbrú. Balvin y Bouteille se mantienen entre los mejores de la Liga Endesa a nivel estadístico, tanto a nivel de valoración como en rebotes en el caso del pívot y en anotación si se mira al francés. Lo que sucede es que el RETAbet necesita que ambos recobren su mejor versión para volver a ser los líderes que el grupo necesita sobre la cancha, algo que no ha sucedido en los próximos compromisos. Pero además, hay otros jugadores que deben aportar más al grupo, aquellos que han llegado esta temporada a una formación recién ascendida de la LEB. Rafa Martínez, Rousselle, Sulejmanovic, Sergio Rodríguez y Kulboka son, junto a Balvin y Bouteille, los fichajes de esta temporada y salvo Kulboka, un joven talento que todavía tiene mucho que aprender, los llamados a aportar la experiencia que necesitaba una plantilla bisoña en esto de competir en la máxima categoría.

Sin embargo, en los puestos de dirección, tanto Brown como Schreiner se encuentran en muchos encuentros a la misma altura de rendimiento que Rafa Martínez, todo un veterano de la ACB y con un gran recorrido en el Valencia, y que un Rousselle al que le está costando muchísimo adaptarse a la categoría. En el lanzamiento exterior, casi siempre el peso recae sobre un Bouteille al que los rivales ya comienzan a tomarle la matrícula y saben cómo defenderle, por lo que son otros jugadores los que deben compartir la responsabilidad de anotar, como un Sulejmanovic que aporta mucho más en defensa que en ataque. Y en el juego interior, Lammers sigue creciendo como pívot, pero necesita estar arropado por Balvin, que debe ser el actor protagonista y arropar al recién llegado.

De cara al calendario que afronta hasta fin de año, el Bilbao Basket necesitará de todos ellos, y la aportación de jugadores con un rol secundario como Tomeu Rigo, Iván Cruz -con presencia testimonial- o Sergio Rodríguez, para salvar unos encuentros que se antojan vitales de cara al futuro inmediato del club en la ACB. La fina línea que separa la tranquilidad a vivir un inicio de 2020 con la angustia metida en el cuerpo.