«Para ganar al Madrid tenemos que hacer un partido perfecto»

La dificultad aumenta si se tiene en cuenta la grave lesión de Tomeu Rigo, que limita las rotaciones de Mumbrú. El escolta se rompió el cruzado de su rodilla izquierda en Badalona y el club, en un gesto de nobleza, le ha renovado. «Es de una elegancia que no se suele dar en el mundo del deporte», ha manifestado Mumbrú. Como es lógico, se le ha cuestionado por si el Bilbao Basket saldrá al mercado para suplir su baja. Las estrecheces económicas limitan un mundo y el catalán no ha querido avanzar nada, aunque ha dejado caer que le «gustaría» contar con un sustituto que además le permitiera hacer cupo -lo necesita sobre todo en Europa-. «Vamos a ir poco a poco, con cautela. Tampoco podemos estar fichando y volvernos locos. Intentaremos hacer lo que podamos, pero con tranquilidad«. Habrá que ver si finalmente llega alguien y, si llega, que nadie espere un refuerzo de campanillas. Sería algo discreto para cuadrar los números y tirar hacia adelante.

Mumbrú no quiere que sus hombres jueguen sin presión, al contrario, prefiere que entren con tensión en cada partido y que se dejen el alma sin importar quién esté en frente. «Nosotros debemos afrontar todos los partidos con presión. Tenemos las cosas claras de lo que hay que hacer para ganar. No hay relajación y no la habrá contra el Real Madrid. Siempre jugamos con la misma tensión porque, entre otras cosas, no somos un equipo que puede permitirse el lujo de relajarse contra unos y no contra otros. Intentamos dar siempre lo máximo«. El compromiso del domingo exigirá una versión perfecta del RETAbet y un mal día de los blancos para optar a la sorpresa. El técnico de los hombres de negro pretende apurar todas las posibilidades para regalarse un triunfo. »Aguantarles dos cuartos podría ser entre comillas fácil, que no lo es. Ellos juegan los 40 minutos. Muchas veces llevan el partido igualado y en tres minutos te hacen un parcial de 10-0. Debemos estar muy bien en todas las posiciones«.

El preparador catalán no entiende que las ganas se pueden medir, sino que exige que sean las mismas siempre y al más alto nivel sin importar quién esté enfrente. «Es verdad que hay gente (en la plantilla) que nunca ha jugado contra el Madrid y que se puede sentir más motivada. Pero si estamos más motivados contra el Real Madrid que contra cualquier otro rival, entonces seríamos un mal equipo. Tenemos que estar motivados frente a cualquiera. No podemos relajarnos, sino siempre ir al máximo y luchar cada partido«. Los de Pablo Laso llegarán a Miribilla después de haber completado su semana de Euroliga contra el Khimki (miércoles) y el Armani Milan (este viernes), pero Mumbrú insiste en que su potencial no se verá mermado. »Tienen 14 jugadores. Pueden ir cambiando como quieran y ser competitivos y físicos. Es una plantilla larga y están acostumbrados a la fórmula martes-jueves-domingo. No podrán entrenar, pero sí dispondrán de tiempo suficiente para recuperar«, ha indicado.

Después de repasar todas las figuras del conjunto blanco, desde Campazzo hasta Tavares, a quien ha definido como un jugador «determinante», Mumbrú ha valorado la presencia de 600 aficionados en las gradas de Miribilla en Europa. Le gustaría que se avance por el mismo camino en la ACB, pero de momento deberá conformarse con los ánimos que recibirán en la Champions. «Es un pasito más. La gente nos podrá ver y nos dará un poco de calor ambiental. En un pabellón de 10.000, 600 no son muchos, pero hay que empezar por algo. Vamos a ver si con estos pequeños pasitos conseguimos ir volviendo poco a poco a la normalidad«. El domingo no habrá nadie en las gradas, aunque al menos al equipo le acompañarán fotos de los aficionados. »Es una iniciativa bonita. La gente estará con nosotros en el pensamiento«, ha reflexionado el técnico barcelonés.