«El Bilbao Basket es un equipo para ascender y vamos a ascender»

Ahora, el domingo (12.00 horas en Miribilla) espera el Cáceres Patrimonio de la Humanidad, decimosexto con tres partidos ganados y siete perdidos, justo lo contrario que los de Mumbrú (cuartos con siete victorias y tres derrotas). En Miribilla, en la undécima jornada, no estarán ni Larsen ni Schreiner -con sus selecciones-, de ahí que Demetrio quizás deba jugar más minutos, aunque «no me importa la posición de cuatro o cinco, porque lo que siempre quiero es aportar y hacer un buen trabajo». Como ante el Araberri. Se le ha recordado el gran rendimiento que ofreció en la última jornada y se ha congratulado por que «estuve bien en los rebotes ofensivos, pero siempre puedo mejorar».

Y de nuevo, una vez más en una comparecencia de prensa, ahora en palabras del brasileño, se ha repetido que «la LEB es una liga dura. Es mi tercera temporada en esta categoría y cada adversario te puede sorprender. Tienes que estar concentrado y jugar duro. Es una liga que no te perdona si cometes errores. Cada partido es una final para nosotros y tenemos que ganar el próximo, y el próximo, y el próximo…». El de Curitiba progresa «cada día y cada partido estoy mejorando y entrando en la dinámica del equipo, conociendo mejor a los compañeros y ellos a mí. Hay que llegar al mejor nivel para cada partido estar más a tope. Somos el Bilbao Basket y tenemos que ganar los partidos», ha concluido ambicioso.

Otro de los jugadores que ha revelado uno de los principales errores de cara a resolver los encuentros ha sido Tomeu Rigo. El balear, igual que Demetrio, ha coincidido en que «hemos visto que cuando tenemos una renta cómoda de ocho o diez puntos el equipo tiene cierta relajación. Y hay momentos en los que podemos irnos de 15 o 20 puntos para sentenciar el partido. Hay que tener la mentalidad de no perdonar», ha apuntado. Y ha sido sincero al reconocer que «si tiráramos siempre con tensión a lo mejor sería diferente». Ha insistido en que con buenas rentas a veces no se lanza igual que «cuando las cosas están jodidas».

Respecto a la próxima jornada ante el Cáceres, ha advertido de que, a pesar de su clasificación actual, «es un equipo cuyos jugadores llevan muchos años juntos y se conocen muy bien. Saben a lo que juegan y será un rival difícil. Vienen bastante rodados», ha afirmado el escolta, que mandado un mensaje al recordar que también el Araberri estaba abajo. Consultado sobre su menor estancia en la pista en los últimos partidos, sobre todo tras la llegada de Rafa Huertas, ha dicho que «hay minutos que hay que repartir más». Y para terminar, ha vuelto a recordar que la fórmula para evitar sorpresas desagradables es la de aniquilar la «relajación» y tirar a canasta con «tensión».