El Bilbao Basket y los cinco de Prievidza

La franquicia de Miribilla se ha metido otros 4.000 kilómetros para viajar de Las Palmas a Prievidza, con escala en Viena (Austria) y posterior desplazamiento en autobús hasta la ciudad del destino (269km). Todo ello después de ir y volver de Tiflis (Georgia), donde se impuso al Kutaisi, al día siguiente regresó a casa vía Múnich y se marchó de inmediato a Canarias. El cansancio y la fatiga son factores que pueden aparecer, aunque es de esperar que el equipo plasme su superioridad en la pista. Eso sí, el exceso de confianza sobra. El Bilbao Basket tiene un espejo magnífico en el que mirarse con el objetivo de ahorrase el mal rato que le tocó pasar al Zaragoza. Los aragoneses fueron a jugar a Eslovaquia la semana pasada contra el Levice, quinto clasificado en su liga, y fueron apalizados. Perdieron de 16 (96-80) y lo mejor fue el resultado porque llegaron a estar más de 30 abajo. Un ejemplo que debe servir de advertencia al Surne.

«David contra Goliat»

No hay ninguna duda de que los hombres de negro tienen más calidad y profundidad de banquillo que los eslovacos, en manos de cinco jugadores. «David contra Goliat», ha calificado este lunes el Prievidza en su página web el choque ante los bilbaínos. Habló de «seis millones de presupuesto» con los que cuenta el Surne –mal, no llega a cuatro y poco más de 1,2 se destina a la plantilla– y de los «11.000 asientos de Miribilla» –también mal, son 10.000–, pero reivindicó su derecho a soñar y de tumbar a un «gigante». Para ello confiará una vez más en su quinteto confeccionado por el base C.J. Jackson, el escolta Daishon Smith, el alero Keith Jordan, el ala-pívot Remu Raitanen y el pívot Hunter Dean.

Estos cinco hombres son el Prievidza, que acredita un balance de tres victorias y dos derrotas en la liga de su país y dos triunfos en la FIBA Europe Cup. Accedieron al torneo como uno de mejores 'lucky losers' –perdedores– tras caer en la eliminatoria previa frente al Alba Fehervar. Ganaron en casa de 17 (102-85) y cayeron en Hungría por 20 (104-84). Keith Jordan es el segundo máximo anotador de la competición continental con 21,3 puntos por partido y el tercero es su compañero Daishon Smith (18,8), mientras que Hunter Dean lidera el apartado reboteador (12,3). El peligro está ahí. El Surne está avisado.