Vildoza viaja, pero es duda, y Lautaro también va con el equipo

Demasiadas incógnitas y una sola certeza, aunque no sea demasiado exacta. Luca Vildoza, como el croata adelantó al término del partido de Miribilla y corroborado por las pruebas médicas a las que se ha sometido en Vitoria, sufre un esguince en su hombro derecho. El brazo con el que tira. Es la consecuencia de un mal golpe al pasar un bloqueo en el anterior encuentro de Euroliga, el disputado en Moscú contra el Khimki, el pasado viernes. A 18 minutos del final, el argentino se topa por sorpresa con Jeremy Evans cuando perseguía a Daris Bertans. El americano había plantado una muralla para permitir que el letón lanzara de tres con comodidad. Pocos repararon en la acción. Incluso, el marplatense le dio poca importancia. No dejaba de llevarse la mano al hombro, le dolía, pero con el partido igualado (49-48) tras haber estado muy abajo en los primeros 12 minutos, había cosas más urgentes que su articulación.

De hecho, aguantó en cancha otro minuto y medio. Solo a 16,50 del final y tras cometer una falta sobre Shved, que se escapa solo hacia canasta, optó Perasovic por sentarlo. Antes, mientras los árbitros revisaban una aparatosa falta de Booker a Diop, el base y su entrenador habían hablado en la banda de las molestias que estaba sufriendo.

Fueron más serias de lo que parecían y en Bilbao se quedó sin jugar, sentado al margen del banquillo y con el brazo en cabestrillo. En estos momentos es complicado saber si jugará el jueves. Es más, a última hora de ayer tampoco se había tomado la decisión de convocar a Lautaro López para formar pareja de organizadores con un Perriá Henry que lo está jugando todo desde entonces. La expedición azulgrana ha salido a las diez de la mañana de hoy; ahí se ha despejado la primera incógnita: Lautaro ha viajado con el equipo.

La esperanza es que el hombro mejore con el tiempo y que pueda llegar a la cita con el gigante herido. Los de Obradovic han perdido sus dos partidos de Euroliga de esta temporada, ambos como visitante, en Madrid y en Belgrado. No obstante, la apuesta es arriesgada, si se quiere rascar algo en el Ulker Sports Hall de la capital turca. Su nómina exterior es más que notable: Westermann, Ali, Sloukas, De Colo y Mahmutoglu. Demasiado bocado, tal vez, para Henry y Janning. Sobre todo, si Vildoza no llega y Stauskas no da un paso al frente que aleje los miedos sobre el estado de su rodilla. Con tanta duda, quizá acabemos entonando como los Carolina Durante. «La respuesta a todo es: Joder. No sé».