Saludo de Marc Gasol y Fernando San Emeterio. ACB Photo
Fernando San Emeterio Director deportivo del Bàsquet Girona

«Tengo la suerte de que mi jefe sabe algo de baloncesto»

Hombre de confianza de Marc Gasol en el club gerundense, el cántabro contempla un Baskonia que «no ha perdido su esencia»

Domingo, 12 de enero 2025, 00:42

Una exitosa carrera como jugador dio paso a un breve experiencia como entrenador asistente en el Valencia Basket a las órdenes de Joan Peñarroya y Álex Mumbrú. Fernando San Emeterio (Santander, 1984) reconoce que no se veía en el papel de técnico y el pasado ... verano decidió asumir la dirección deportiva del Bàsquet Girona tras aceptar la propuesta de Marc Gasol, propietario de la entidad gerundense. Dos amigos que trabajan mano a mano para asentar un proyecto en una ciudad desde la que ambos despegaron como baloncestístas en aquellos viejos tiempos del Akasvayu. El héroe de la Liga ACBganada por el Baskonia en la campaña 2009-10 espera la visita azulgrana como una oportunidad para ratificar la mejora del plantel catalán tras dos triunfos seguidos ante el Lleida y el Barcelona. «La clave para un club es preservar su identidad y el Baskonia lo hace», asume el exjugador cántabro.

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– Fernando San Emeterio convertido en un hombre de despacho. ¿Se acostumbra?

– Estoy muy contento. Por el camino estuve de entrenador asistente en Valencia. Con la experiencia de haber sido jugador y la de vivir desde dentro lo que es un cuerpo técnico, que ayuda en mi nuevo papel. Estoy contento, pero también aprendiendo. En tres meses he hecho un 'master', entre sanciones, cambios de entrenador y de jugadores. Lo bueno es que ahora las cosas parece que empiezan a enderezarse.

– ¿No le convencía abrirse paso como entrenador principal?

– No me veía. Tengo mucho respeto por la figura del entrenador y más después de haber formado parte de un 'staff' técnico. De jugador siempre piensas que es mucho más fácil, pero cuando te pones a ejercer ese papel te das cuenta de la dificultad que tiene. Siempre digo que ser entrenador no es difícil, pero ser buen entrenador es muy complicado. Creo que no iba a ser buen entrenador, así que fui honesto conmigo mismo y lo dejé.

– ¿De qué le sirve la experiencia como jugador en sus responsabilidades como director deportivo?

– De mucho. Enseguida ves reacciones de los jugadores o sus caras. Detectas si el mensaje del entrenador está calando, si entre ellos hay buena química. A la hora de analizar a un jugador sirve de mucho. Te ayuda a coger la temperatura de cómo está el equipo.

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– ¿Y la presión que impone su nuevo cargo?

– Yo diría que es más constante. Vaya por delante que, ya desde que era jugador, la presión me la impongo yo mismo. Cuando juegas, la presión la tienes en el partido; lo intentas preparar bien y ejecutar las cosas de la mejor manera. Si la cosa salía mal, tenías la presión ese día y esa noche pero al día siguiente pasabas página. Como director deportivo te lo llevas todo a casa, das vueltas a las cosas todo el rato; en casa, cuando estás en la cama... Lo comparo con tener tu propia empresa. Quieres que todo vaya bien y le das vueltas a las cosas de manera constante. No es tanto presión, más bien se trata de la preocupación constante por encontrar soluciones.

– ¿Cómo lleva tener de jefe a un amigo del alma como Marc Gasol?

– Lo llevamos muy bien. Fue una de las primeras cosas que hablé con él cuando iniciamos esta nueva etapa. Si nuestra relación de amistad se viera afectada... Es como un acuerdo no escrito entre nosotros. De momento, las cosas están yendo bien, aunque en lo deportivo no todo ha ido como esperábamos. Lo importante es que hemos seguido unidos, dentro de una línea marcada. Es evidente que cada uno da su opinión, pero tengo la suerte de que mi jefe sabe algo de baloncesto. Tiene mucha experiencia en diferentes ámbitos y nos complementamos bien, porque en muchas cuestiones tenemos las mismas ideas. Es difícil que nos colemos uno a otro alguna mentira en cuanto a baloncesto.

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– De ese máster del que hablaba, ¿el examen más duro fue despedir a Fotis Katsikaris?

– Sí. No fue para nada fácil. Y más cuando, aunque suene a tópico, él no era el único responsable. Pero debes tomar decisiones y consideré que era la mejor en ese momento.

Construcción de equipo

«Cada vez es más importante hacer bien los deberes en verano»

– El Bàsquet Girona apuntaba en verano a la opción de disputar una competición europea. ¿Han tenido que recalcular la ruta?

– El principal objetivo era mantener una línea de juego buena, que era lo que no estaba pasando. Por encima de resultados, mi meta era tener un equipo que fuera valiente, con lo mejor de la juventud; ese descaro y las ganas de comerse el mundo. Si estoy contento ahora es porque, más allá de los dos últimos partidos que hemos ganado, sí estoy empezando a ver ese equipo que quería, con gente valiente, dándolo todo, ayudándose y comunicándose.

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– ¿Qué reflexión le merece ver que el Baskonia sufra tanto para alcanzar la Copa del Rey?

– Yo viví algo similar en Valencia como jugador y entrenador. Y es que es muy duro combinar la Euroliga con la Liga ACB. Resulta muy complicado rendir al cien por cien cada día cuando acabas de jugar en Bolonia, dos días antes frente al Coruña y hace cuatro contra el Real Madrid. La parte positiva que le veo este año al Baskonia es que no está perdiendo su esencia de toda la vida, que es el carácter. Han tenido partidos de perder de veinte y lograr remontar. Mientras esa esencia siga ahí, continuará compitiendo. Habrá años que los resultados acompañen más, pero lo importante es preservar la identidad de un club y de un equipo. El Baskonia lo hace.

El Baskonia actual

«No está perdiendo su esencia de toda la vida, que es el carácter»

– Haga un diagnóstico del mercado actual. ¿Se mueve menos dinero y menos jugadores?

– La situación es complicada y lo estará todavía más. Por un lado tenemos la Liga de Desarrollo de la NBA, que ya paga bien y de la que no es fácil sacar jugadores. Además, las competiciones asiáticas y la liga australiana están creciendo una barbaridad. El jugador que no puede estar en Estados Unidos, ahora tiene mucha más oferta aparte de Europa. Todo es más complejo y por eso creo que cada vez es más importante hacer bien los deberes en verano, ya que durante el año es difícil hacer cambios.

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Héroe en el título liguero

«Es algo que nunca se olvida. Cada 15 de junio cae una copita de vino a la salud del Baskonia»

– Ya son 14 años desde que anotara aquel 2+1 que dio al Baskonia el tercer título liguero de su historia. ¿Todavía le paran por la calle?

– Sí. Es algo que nunca se olvida. El club, Vitoria y yo siempre estaremos unidos por aquel momento. Cada 15 de junio, una copita de vino cae a la salud del Baskonia.

– Su marcha del Baskonia se produjo tras vivir momentos tensos con el club debido a su elevado contrato. ¿El tiempo lo cura todo?

– Sí. En Vitoria tuve momentos espectaculares. Fueron siete años maravillosos y tengo una hija vitoriana de por vida. Eso queda ahí por encima de cualquier otra cosa y creo que por parte del club también. Me quedo con que fue una época maravillosa, con vivencias que nos unen para siempre.

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