Shengelia ya ha jugado más de 1.500 minutos esta temporada

Dejando las bromas a un lado, lo cierto es que el capitán ha jugado el 78,6% de todos lo minutos posibles esta temporada. No ha faltado a ninguno de los 48 encuentros disputados -26 en Euroliga y 22 en ACB-, ni a las tres prórrogas -la de Barcelona y las dos de Fuenlabrada- que hacen que el Baskonia lleve 1.935 minutos de competición.

Una divertida anécdota del Estudiantes cuenta que un jugador pedía los lunes libres porque le dolía la mano de lo mucho que lanzaba a canasta ciertos domingos. Y es posible que a alguno de los azulgranas le pesen hoy las piernas. No al georgiano, que ha convertido los excesos en rutina. Es el que más juega en la ACB, el único que pasa de los 700 minutos.

Es el segundo con más minutos totales en Euroliga, por detrás de Nick Calathes. El cuarto en promedio con Shved y Micic superando sus 30' 22'' de media. En total, 1.522 minutos. Algo así como 25 horas y 20 minutos.

Lo llamativo de los casi 48 minutos que acumuló el ala-pívot de Tiblisi en el Fernando Martín de Fuenlabrada no es por lo anecdótico, sino por que es solo un paso más en algo habitual en él.

No tanto en Ivanovic, claro, que siempre ha optado por quintetos definidos en los que sus mejores hombres pasaban muy poco por el banquillo. Quizá el encuentro paradigmático de todo esto se disputara hace 15 años en Málaga.

Era el play off de 2005. Tercer partido contra Unicaja. Los locales necesitaron dos prórrogas para que no se acabara la serie ese mismo día. Entonces, Sergi Vidal se fue a los 50 minutos. Es decir, que no se fue en ningún momento de la cancha. Desde el salto inicial hasta el bocinazo que cerraba el segundo tiempo extra. Prigioni tampoco descansó demasiado (43'08'').

Entre los rivales, Stephane Rischaser superó los 46 minutos. Jorge Garbajosa hizo casi 41. Scariolo, que hoy hace campaña por la gestión de tiempos y las rotaciones, hacía poco experimento desde el banquillo del Martín Carpena.

Fran Vázquez es otro de los que compitió en aquel duelo para el recuerdo, aunque lo perdiera el Baskonia (95-92). El gallego, 17 minutos ese día, es el que ostenta el récord de más minutos jugados en un mismo encuentro.

Fue en 2009, con la camiseta del Barcelona, entrenado por Xavi Pascual. Contra el Manresa, que ganó el derbi, dirigido por Jaume Ponsarnau. Aquel 122-117 tiene complicado olvido. Se necesitaron cuatro prórrogas para tener un vencedor. Vázquez estuvo 50'59'' sobre las tablas del Nou Congost. Con el tamaño de ese pabellón es casi un cautiverio.

Navarro, parecido, 46'47''. Y entre los locales, otro gallego se llevó la palma, Javi Rodríguez con 44 minutos y medio, mientras que el par de Vázquez, un tal Serge Ibaka, campeón de la NBA la pasada temporada paseó su imponente físico durante casi 42 minutos por la pintura manresana.