Shane Larkin pasa de largo

El club estambulí vuelve a dar otra voltereta a un mercado europeo un tanto depresivo en un verano que comenzó con el reclutamiento de Rodrigue Beaubois. El Anadolu Efes convirtió en humo la pretensión baskonista de renovar al escolta francés y ahora también quiebra el sueño de volver a contar con Shane Larkin en las filas azulgranas. El club vitoriano ha estado en la puja por un jugador que causó un impacto profundo durante su único año en la capital alavesa. Sin embargo, Larkin ha optado por la mejor propuesta económica, sin dar opciones a regateos ni hacer caso de la maldición que persigue al Efes, acostumbrado a desembolsos millonarios que no van de la mano con brillantes resultados deportivos en la Euroliga. El Baskonia anduvo al acecho y, según fuentes consultadas, propuso al estadounidense una oferta por dos temporadas. Había que intentarlo, pero era un planteamiento que chocaba con las pretensiones del jugador. Larkin quería un compromiso corto para poder tener las manos libres el próximo verano. Al final, lo ha encontrado en el Anadolu Efes.

Larkin vuelve a Europa como un jugador de cotización sobresaliente, uno de esos decartes de la NBA por los que se pelean los grandes clubes de la Euroliga. En su primera expiriencia con el Baskonia, ya era un jugador de cierto caché, primera ronda del 'draft' y un sueldo que, durante su etapa en Vitoria, estuvo alrededor de los 800.000 euros. El Anadolu Efes ha elevado su sueldo de forma astronómica.

Ante semejante órdago, tanto el Baskonia como el resto de pretendientes que esperaban a Larkin han optado por no perder la cabeza. Al fin y al cabo, el cortejo al base de Ohio no tapa el hecho de que el club baskonista cuenta con tres directores de juego sujetos a contrato para la próxima temporada. Luca Vildoza fue el gran hallazgo de la pasada campaña mientras que Jayson Granger y Marcelinho Huertas mostraron un rendimiento inconstante, con picos brillantes pero también momentos más oscuros. A pesar de todos, El Baskonia alcanzó con esta terna de directores la primera final liguera en ocho años, una cima que no coronó con Shane Larkin a los mandos.