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Treinta puntos de diferencia endosados al Real Madrid en el Buesa Arena y una veintena al Zagiris en Kaunas. Antes de ambos partidos, el triunfo práctico en casa ante el Joventut y hoy el Baskonia tiene la oportunidad de sumar su cuarta victoria consecutiva ... en la cancha del San Pablo Burgos. Pase lo que pase, ya es su mejor racha desde el arranque de campaña. Los dos recitales en la Euroliga han devuelto al plantel azulgrana la confianza en un estilo obligado a reinventarse de manera radical tras la renuncia de Pablo Prigioni y la llegada de Pedro Martínez.
Ahora, la colección de elogios aumenta, aunque también conviene recordar que por cada una de las tres últimas victorias ha perdido a un jugador por el camino. Primero fue la fractura de mandíbula de Patricio Garino, más tarde la rotura de un dedo de la mano izquierda de Diop y tras la batalla de Kaunas, el hombro izquierdo de McRae volvió a recordar que no todo está en su sitio en dicha articulación. El argentino tiene entre cuatro y seis semanas de baja, la convalencia del senegalés puede alargarse hasta los dos meses y el estadounidense queda bajo observación, sin plazo de vuelta ni una perspectiva clara en el futuro cercano.
Mientras, Matt Janning estrena contrato hasta final de temporada para apuntalar un perímetro ahora diezmado. El estadounidense se suma como pieza polivalente a Rodrigue Beaubois y Janis Timma. Bajo los aros, la baja de Diop deja a Voigtmann y Poirier como únicos 'cincos'. Malmanis sigue dando respiro a Shengelia en una situación cuya fecha de caducidad se desconoce.
La trayectoria exitosa del conjunto azulgrana desde el pasado domingo contrasta con su carácter menguante debido a los problemas físicos. Debe visitar hoy a un San Pablo Burgos fresco que la pasada jornada sumó el primer triunfo de su historia en la ACB ante el UCAM Murcia después de rondarle durante las semanas precedentes con buenas actuaciones sin premio ante el Valencia Basket y Real Madrid. El Baskonia busca una victoria que le permita situarse en zona copera y rematar una semana hasta ahora brillante en resultados y nivel de juego. Los burgaleses, por su lado, pretenden dar continuidad a su único triunfo después de un arranque de campaña de durísima aclimatación.
El poder interior de Goran Huskic o la calidad de Deon Thompson ejercen de puntales de una escuadra en la que el baskonista Tadas Sedekerskis no termina de encontrar encaje. Al rescate acaba de llegar John Jenkins para inyectar talento, explosividad y puntos al perímetro del San Pablo Burgos. El anfitrión espera hoy despejado y ansioso al maratoniano baskonista con la moral alta por los últimos resultados pero sin algunas piezas en su chasis y justo de combustible.
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