Baskonia-Gran Canaria | Domingo 20.00 horas
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Cuántas veces se ha dicho eso de que hace mucho frío lejos del calor del hogar. Da igual que te mudes a Gran Canaria y su clima subtropical. El rendimiento, la proyección, el despegue, de Ilimane Diop (Dakar, 1995) se congela. Promedia 11 minutos por ... partido, en ninguno ha superado la veintena y en los últimos tiempos, alterna ser el último de la rotación de Fisac con quedarse desconvocado, como le ocurrió el pasado sábado en el derbi ante el Tenerife.
El técnico le elogia por su trabajo diario, pero no le convence su desempeño sobre la pista. «Necesita mejorar tras muchos años de que con poco parecía mucho», sentencia el segoviano. El cometido por el que contrataron al poste de Dakar por dos años es una posición de ala-pívot que no le está jugando una buena pasada y que en algunos tramos de sus ocho temporadas en el Baskonia (451 partidos) ya dejó entrever que no iba a ser la plataforma ideal para su esperado despegue.
Ocho meses después de su emotiva rueda de prensa de despedida, a Diop en el Gran Canaria Arena todo le suena familiar. Como si aquello de los últimos años a lo que pretende darle la vuelta no lo hubiera tenido en cuenta. Vuelve al mismo lugar y de la misma manera. Atornillado al banquillo. El año pasado, el que menos jugó de todos, promedió 10 minutos en la ACB y 7 en la Euroliga. Ahora son 11 en liga y 12 en la Eurocup, con unas estadísicas de 3,3 puntos, 2,8 rebotes y 2,7 de valoración en liga y ligeramente superiores en la segunda competición continental: 3,7 tantos, 2,3 capturas y 3,4 créditos de valoración.
A su discreto inicio de temporada hay que sumarle la pérdida de confianza de Fisac. Le pide ser un 'cuatro' abierto y su amenaza exterior está siendo exigua: 14% en triples en la ACB. «No está fino en muchos sentidos. Debe dar un paso adelante en su rol», apuntó el técnico el pasado 24 de febrero. Dos días más tarde, el Gran Canaria repescó de su cesión a Balcerowski, engrosando así una extensa nómina de jugadores interiores en la que Diop está siendo el sacrificado. Nada parece marchar bien para el jugador senegalés en un destino en el que aspiraba a relanzar su carrera.
El excapitán azulgrana queda en la rotación por detrás de Pustovyi, Shurna, el prometedor Khalifa Diop, Stevic y el propio Balcerowski. Desde su llegada, se ha quedado sin jugar en tres de los seis partidos de ACB y en uno de los tres de la Eurocup, donde el martes disputó dos minutos contra la Virtus en su reencuentro con Shengelia. Su única participación en las dos últimas semanas. Espera volver a hacerlo sta noche en el Buesa, motivado, en busca de un punto de inflexión que le acerque a esos buenos finales de temporada que acostumbra a hacer.
La vida sigue para el Baskonia después de concluir una Euroliga de sinsabores a pesar de la reacción en las últimas jornadas. Los apuntes de mejora de las precedentes jornadas continentales dejan entrever la esperanza de un cierre de temporada con mayor brillo. Ya metidos en primavera, el frente de la Liga ACB se abre para la escuadra azulgrana, obligada a una escalada continua en el frente doméstico para asegurarse el mejor puesto posible en los play off.
El duelo de hoy ante el Gran Canaria no es uno más en el itinerario. La escuadra insular llega al Buesa Arena como rival directo en una clasificación comprimida por las estribaciones por las que transitan ambos equipos. Los vitorianos se agarran a la séptima plaza con 14 victorias, una menos que la escuadra que dirige Porfi Fisac, convertida en perseguidora. La presión se mantiene a espaldas del Baskonia después del triunfo cosechado ayer por el UCAM Murcia en la cancha del Betis y que le permite situarse a la par que los alaveses en la tabla. Todo estar en un pañuelo y el plantel vitoriano busca hoy una victoria que le permita doblar apuestas en un esprint cerrado hacia el cierre de la fase regular.
El choque ante el Zalgiris dejó la inquietud sobre el estado físico de Wade Baldwin, que no pudo disputar el partido debido a molestias en el hombro. El base estadounidense es duda para el encuentro de hoy ante los canarios. El Baskonia no necesitó de su brillantez para superar a los lituanos, pero conviene no cargar la suerte en una plantilla que no va sobrada de efectivos.
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