Carlos Pérez de Arrilucea
Miércoles, 9 de octubre 2024, 01:05
La gestión de una academia de baloncesto en Belgrado y la crianza de sus tres hijos son los principales desempeños vitales de Igor Rakocevic a sus 46 años. La pasión por el baloncesto sigue intacta, casi tanto como su veneración por la banda británica de ... heavy metal Iron Maiden. En Belgrado, compiten hoy los dos equipos de su vida; el Estrella Roja en el que comenzó y terminó su carrera y un Baskonia en el que desplegó su maestría anotadora durante tres temporadas. ¿Preferencias? Solo su hija Vesna lo sabe. Y la respuesta queda en secreto...
Publicidad
– ¿Belgrado es ahora la gran capital del baloncesto en Europa?
– Podríamos decir que sí. Es la única ciudad con dos equipos en la Euroliga. Partizan y Estrella Roja generan grandes ambientes en sus partidos y arrastran mucho público. Aquí el baloncesto es la vida, el deporte número uno. Hay muchísima tradición, el público entiende de baloncesto y puede sentir lo que sucede en cada momento de un partido. Es algo similar a lo que viví en el Buesa o en Siena. Muy distinto a lo que sucede en otras canchas, donde el público es más indiferente al juego.
– Los Balcanes siempre han sido tierra de baloncesto. ¿De dónde sale ahora el dinero para que Partizan y Estrella Roja acometan semejantes inversiones?
– Desde hace un par de años los fichajes son mucho más caros. Hay mucho interés, muchos patrocinadores que están dando dinero y la realidad es que los clubes se enriquecen con la venta de entradas. Los abonos de temporada se agotan en una semana. Además, el Estado serbio está ayudando tanto a Estrella Roja como a Partizan. Puedes escuchar a muchas personalidades hablar de este apoyo público y que sin él, los prepuestos de ambos clubes no serían tan grandes.
– ¿Tanto dinero y la llegada de jugadores foráneos daña a la tradicional cantera serbia?
– No es el caso del Estrella Roja, que tiene un gran número de serbios. Es lo que más me gusta, que no se cambie la plantilla por completo cada año. Es lo mejor para que al aficionado le dé tiempo para conocer, entender a los jugadores y enchufarse al equipo. Si, por ejemplo, un padre le compra a su hijo la camiseta de Tiago Splitter, que se quedó unos años en Vitoria, eso siempre ayuda. Es lo que me gustaba del Baskonia, muchos jugamos juntos muchos años, lo que daba identidad al equipo.
Publicidad
– Al Baskonia cada vez le resulta más difícil retener el talento.
– En mi época, el Baskonia tenía la filosofía de traer argentinos y balcánicos, que tienen una mentalidad similar: sangre y fuego intenso para ganar. Fue una época fenomenal. También sucede que el Baskonia mantiene a figuras dirigentes importantes en el club durante muchos años. Hablo de gente como Josean Querejeta, Alfredo Salazar o Félix Fernández, pero también del responsable de material, Santi Matilla, o del preparador físico, Oskar Bilbao, entre otros. Eso también aporta mucha identidad al club.
– ¿Qué papel tuvo en su vida el Baskonia?
– Es como una segunda casa. Junto al Estrella Roja, es el equipo más importante de mi vida. Tengo un cariño tremendo por la ciudad y por su gente. Jugué allá hace 15 años. Es normal que te olviden las nuevas generaciones, pero estuve en Vitoria hace un par de semanas y mucha gente me sigue reconociendo. También hay una conexión muy sentimental porque mi hijo nació en Vitoria.
Publicidad
– Defendió tres temporadas la camiseta azulgrana entre 2006 y 2009. ¿Por qué no pudieron ser más?
– Si pudiera cambiar una decisión en mi carrera, me hubiera quedado más años en Vitoria. Pero la vida es así. En aquella época la gente de Serbia necesitaba visados para viajar, lo que suponía un problema para que mi familia viniera. Además, se fueron jugadores como Prigioni y Mickeal y pensaba que se iba a dar un cambio de ciclo. El Efes jugaba en Estambul, que está a una hora y cuarenta minutos de Belgrado en vuelo directo. Echaba mucho de menos mi país. El Efes me hizo una oferta muy importante, pero el dinero no fue decisivo. Nunca fui un jugador que va donde le pagan más.
– Al menos cerró el círculo concluyendo su carrera en el Estrella Roja, su cuna baloncestística.
– Era algo que había prometido, una forma de agradecer a club y aficionados su apoyo desde que comencé en un club donde había jugado mi padre, mi hermana y ahora mis dos hijos. Uno de ellos, Ivan, dice que su gran deseo es jugar en el Baskonia. Ya le digo que es una buena decisión, que en Vitoria tiene casa y que me puede pagar a mí el alquiler (risas).
Publicidad
– Cuando se ensalza a un anotador como Markus Howard, ¿no le sale una sonrisa un tanto pícara a Rakocevic?
– El Baskonia siempre ha tenido jugadores tremendos en todas las posiciones. Para que un baloncestista sea reconocido en un equipo tiene que jugar varios años al nivel más alto. Howard tiene ese tiro triple desde posiciones muy difíciles que no se ve mucho en Euroliga, es su calidad especial. Lo que puede levantar a ese jugador a un nivel todavía más alto es ganar algún trofeo con el Baskonia. Eso es importante.
– Explique la dura vida del escolta anotador.
– La mejor posición para jugar es la de base, con el balón en las manos durante muchos minutos y la posibilidad de anotar, pero también asistir o aportar en otras facetas. El anotador depende de muchas cosas; que se armen jugadas para ti, que el árbitro te respete y puedas ir a la línea de tiros libres, que tengas un buen día en la anotación, si doblan las defensas sobre ti... Hay muchas cosas que debes superar para jugar bien.
Publicidad
– ¿Cómo ha sido el arranque de temporada del Estrella Roja?
– Han ganado el primer partido contra París sin jugar muy bien. Estuvieron cerca de caer, pero anotaron unos triples increíbles desde posiciones muy difíciles después de ir 13 puntos abajo. En la Liga Adriática han perdido dos partidos y están en una posición de tener que ganar en casa al Baskonia.
– ¿Qué choque espera contra el Baskonia?
– En términos de calidad, son dos equipos en este momento parejos. El Estrella Roja tiene la ventaja de disponer de mejores tiradores. Dependen mucho del tiro triple. El Baskonia es más atlético, con bases y exteriores más completos y un Donta Hall que está poniendo muchos tapones. Además, se ve la mano de Pablo Laso, al que considero un entrenador de mucha calidad, tanto en lo humano como lo profesional. Coincidí con él en Valencia en su primer año como técnico en la ACB y tengo muy buenos recuerdos de él. Es una persona honesta, sabe motivar a la gente y sabe cómo acercarse y hablar con cada miembro de un equipo. Puede ser un amigo para los jugadores, pero es un amigo al que sabes que tienes que respetar.
Noticia Patrocinada
– ¿Cómo encaja McIntyre en el conjunto serbio?
– Como un base puro, intentando hacer muchas asistencias y buscando el mejor nivel defensivo. La gente tiene muchas esperanzas puestas en él. Será un jugador muy importante, porque tiene buen físico y mucha experiencia. El Estrella Roja va a depender mucho de él.
– ¿Con qué equipo va hoy Igor Rakocevic?
– Es muy difícil contestar. La respuesta solo la sabe mi hija (risas).
Accede todo un mes por solo 0,99€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.