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La temporada regular marcha por el ecuador. Ese término medio que ya ha rebasado la Euroliga y al que le falta un solo compromiso en la ACB para doblar la esquina. De ahí que al Baskonia le quede por confrontar de nuevo sus fuerzas ante ... todos los adversarios domésticos y continentales. Aunque los tres compañeros de viaje en la Euroliga ya han medido sus prestaciones dos veces con el equipo vitoriano. Y queda claro que el Barça se yergue como la única piedra en la que el conjunto alavés ha tropezado a pares. Porque los hombres de Joan Peñarroya se han impuesto a Real Madrid y Valencia en los dos compromisos ya celebrados. Por seis puntos reincidentes frente al cuadro blanco aquí (88-82 y 92-86) y con el Valencia de rival (71-81 en La Fonteta y el reciente 85-79 bajo el techo del Buesa Arena.
Dentro de ese hueso tan duro de roer que deja los dientes limados emerge la figura imperial de Jan Vesely. El pívot checo que cinceló gran parte de su prestigio en el Fenerbahçe, club turco con el que ganó el máximo torneo continental en 2017 a las órdenes del señor de los anillos (Zeljko Obradovic) y donde alzó el premio de jugador más valioso del torneo dos años después. Discutir su valía suena al colmo del absurdo. Lo que más duele es que el mejor encuentro europeo esta temporada del poste blaugrana data de la visita baskonista al Palau. Nada menos que 18 puntos y trío de treses (rebotes, asistencias y recuperaciones) que le depararon 27 créditos.
Sin duda, el mayor obstáculo carnal dentro de un adversario inasequible esta campaña según los intereses vitorianos. Un pívot completo y determinante para el que cuesta hallar el antídoto. Sobre todo en una escuadra alavesa que no va sobrada de intimidación por dentro pese a la elogiable voluntad de Kotsar y el gen taponador de Costello.
Los promedios de Vesely quedan lejos de su gran obra ante el club vitoriano. 8,5 puntos y 3,5 rebotes este ejercicio dentro del campeonato continental, números inferiores a sus históricos en el torneo de las líneas aéreas turcas. Así que el checo se crece por encima de sus 2.11 metros frente al Baskonia y lidera el enorme peligro colectivo del plantillón que entrena Sarunas Jasikevicius. Empezando por un juego interior insuperable a los ojos europeos con el estelar Mirotic, Da Silva, Sanli y Tobey acompañándole. Y siguiendo por la eslora alargada que componen bases de alto nivel (Satoransky, Jokubaitis y el letal ejecutor Laprovittola desplazado al puesto de escolta), 'asesinos' desde la larga distancia (Higgins, Kuric y Abrines) y el multiusos Kalinic. Vértigo se debe de sentir sobre la cubierta de semejante trasatlántico en forma de plantilla.
A favor del Baskonia queda la 'localía' en argot argentino. Porque las dos derrotas previas se localizaron en el Palau, donde rige la teoría de la dilatación por la que las citas se hacen tan largas. El grupo de Peñarroya se sintió arrollado en el segundo tiempo allá tras una espléndida primera parte doméstica. Y le sobró el último cuarto europeo.
27Créditos de valoración sumó Vesely en el duelo europeo con 18 puntos, 3 rebotes y 3 robos
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