El resultado fue engañoso. «Podríamos haber ganado por más ventaja», reconoció Peñarroya orgulloso del camino que está trazando el equipo. «Desde la jornada uno, el Baskonia está en la fiesta y dije que queríamos molestar. No ha cambiado nada. Hasta las dos últimas tres jornadas ... va a haber un jaleo… estamos viviendo la fase regular más bestia que se ha vivido. El formato convierte la competición en una locura. Pero bendita locura», confesó.
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Resaltó las cosas que no le gustaron. Pese a que el Panathinaikos «acostumbra a agarrarse muy bien a los partidos», consideró que a su defensa le faltó solidez en varios momentos . «Nos han anotado 52 puntos. Tenemos que mejorar», asume con la tranquilidad de meter en el zurrón la decimotercera victoria en la Euroliga. «Ha sido muy importante en una semana exigente y con problemas».
No se corrió riesgos con Hommes, con molestias físicas, y hubo dudas con la comparecencia de Costello. «Matt ha estado toda la tarde con vómitos y no sabíamos si iba a poder jugar». Lo hizo durante casi veinte minutos y anotó 17 puntos. El segundo partido que disputa entre interrogantes tras el del Girona cuando su mujer estaba ingresada a punto de dar a luz.
Al Baskonia le costó mucho de inicio. «Demasiado blandos en los primeros cinco minutos». 4-14 de parcial y solo cinco puntos anotados en otros tantos minutos hasta que Howard sincronizó la onda buena. «Ahí hemos controlado el ritmo». Con unos buenos minutos de Heidegger, debutante ayer en el Buesa. «No se le ha visto dudoso o perdido y esto está bien. Sabe de qué va esto. Tiene una muy buena mentalidad. Viene con ambición, ha pasado muy bien el balón y ha hecho el juego que pretendíamos y ha estado esforzado en defensa. De los que más ha apretado el balón».
Peñarroya sabe que tiene el reto de introducirle en el engranaje del equipo cuanto antes. «La semana que viene tenemos tres días de entreno que a él sobre todo le vendrán bien». Aunque primero piensa en el partido de mañana ante el Zaragoza en el que espera empezar a recuperar el acierto en el triple.
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Anoche, sin embargo, lució un notable 67% en lanzamientos de dos puntos. «Creo que somos un equipo que siempre se ha movido bien en el equilibrio entre los tiros de tres y de dos pero luce más el triple. Tenemos un juego más equilibrado de lo que muchos dicen», reivindicó antes eludir verbalizar que el objetivo del Baskonia es entrar en play off. «Me lo preguntáis cuando queden tres jornadas».
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