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Pablo Laso ha comparecido en la sala de prensa del Fernando Buesa Arena, al término del último entrenamiento previo a la visita del París, para explicar qué debe de conseguir el Baskonia en el ánimo de rebajar al adversario más efervescente de la Euroliga. El conjunto francés llega líder a Vitoria con una idea de juego hiperdinámica a la que conviene tender trampas.
«Tenemos que obligarles a defender», insiste el técnico vitoriano, centrando esa labor fundamentalmente en los primeros segundos de cada posesión visitante. ¿Más encomiendas azulgranas? «Debemos de bajar nuestro número de pérdidas porque ellos -en referencia a los jugadores que entrena Tiago Splitter- son agresivos, corren y anotan en transición. Así que necesitamos hacer buenos tiros». Cargar el rebote en el aro rival también ralentizaría el ritmo de alto voltaje que propone cada noche el París.
El preparador azulgrana prevé un duelo «complicado a nivel mental» frente a un adversario que exige máxima concentración durante todo el encuentro. «Es la sorpresa de la Euroliga por número de victorias dentro de una competición en la que todos los equipos son muy complicados», entiende Laso. Forman el cuadro que encabeza la tabla «hombres que llevan jugando años juntos con la base del Bonn y que han crecido como grupo sin cambiar muchas cosas».
La primera vuelta del torneo muestra a un bloque galo «muy competitivo y con mucha agresividad en defensa, donde asume riesgos». Al otro lado de la cancha se mueve desde «la inspiración individual». Desde luego, a partir de Shorts y Hifi. «Los dos generan mucho y claro que podemos parar a Shorts, pero es la teoría de la manta corta».
Laso, que cuenta con toda la plantilla para el compromiso navideño de esta noche, recuerda el partido de ida para impulsarse desde aquello que el Baskonia hizo bien. «Allí controlamos su ritmo de anotación y dominamos el partido pese a ir por detrás en el marcador. Claro que si no metes, todo cuesta más».
Efectivamente, el grupo vitoriano apenas alcanzó el 30% en lanzamientos de campo (20 de 67) con un mísero triple anotado en veintiséis intentos hasta sellar una derrota ajustada (67-65). El técnico local considera que «las fechas navideñas son muy buenas para el baloncesto en Vitoria». Así lo atestigua la gran asistencia que se prevé, vendidas ya 14.000 entradas, para la jornada en la que el club izará su notorio palmarés al techo elevado de Betoño.
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