Carlos Pérez de Arrilucea
Martes, 14 de marzo 2017, 23:33
La llegada del CSKA a Vitoria se escribe en palabras mayores. La sensación de que se acerca un partido de dimensiones mayúsculas comienza a tomar cuerpo a medida que avanza la semana. El Baskonia quema jornadas de preparación con sensaciones encontradas, entre la confianza de ... haber competido de una manera magistral en la cancha del Fenerbahce y el mal sabor de boca que dejó el apagón del pasado domingo en Manresa.
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«Es algo muy difícil de explicar. Ellos salieron con más ganas. Debemos aprender de ese error», reconocía ayer Ilimane Diop al ser preguntado por semejante desdoblamiento de personalidad. El calendario y la alternancia sin apenas respiro entre los choques continentales y los compromisos deparan una sesión continua en la que al Baskonia le resulta difícil mantener la constancia. «La próxima vez, ante equipos más pequeños, debemos salir más concentrados y con más ambición», recomendaba el poste senegalés.
Con Andrea Bargnani sumido en una convalecencia constante y en pleno bache de Johannes Voigtmann, Ilimane Diop ha pasado a ser el termómetro del equilibrio en el puesto de cinco. Sin embargo, es el primero en reconocer que los problemas con la acumulación de personales le imponen mayor dedicación. «Es un aspecto que tengo muy en cuenta, que no es positivo y lo voy a mejorar», se compromete.
«Una buena respuesta»
El duelo ante el CSKA llega y el canterano azulgrana aspira al desquite después de la soberana paliza sufrida en la última visita a Moscú en la primera vuelta. En aquel encuentro, el cuadro azulgrana se rindió ante un rival implacable que le endosó un durísimo marcador de 112-84. «El CSKA nos humilló en el último partido; quiero mi revancha. Además, es un equipo grande que viene a matarte y debes dar una buena respuesta», arengó el interior azulgrana. En aquel encuentro, Milos Teodosic logró el mejor registro estadístico de su carrera al sumar 34 puntos, 2 rebotes, 10 asistencias y 43 de valoración.
La maquinaria moscovita vuelve a amenazar la nave azulgrana, esta vez en el Buesa Arena. Para Diop, la sola mención del equipo ruso le anima a augurar un choque de alta dificultad ante un rival «con mucho talento y con un juego muy ordenado, sabiendo siempre a lo que van». En cualquier caso, el interior azulgrana es de la opinión de que la dura estocada encajada en Moscú no ilustra la diferencia entre los dos contendientes que se medirán el viernes en el coliseo de Zurbano. «Tal y como van las cosas no creo que la diferencia sea real. Nosotros lo pudimos hacer mucho mejor».
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