Shengelia, predestinado para jugar a baloncesto

El jugador comenzó desde bien pequeño a jugar a baloncesto con el ejemplo de su padre siempre presente. Tornike indica en el vídeo que su padre "fue un buen jugador de baloncesto" y que eso le asombraba, y admite la "influencia" de su padre en el juego que desarrolla el baskonista. Juntos hablan "a menudo" y comentan su juego y cómo mejorarlo, reconoce el ala-pívot.

Antes de abandonar Georgia, con 16 años, su padre fue también su entrenador y quien le preparó para salir del país. Ahora, tanto él como su madre, siguen de cerca sus actuaciones con el Laboral Kutxa. Shengelia comenta los aspectos positivos y las dificultades que tuvo cuando con 16 años abandonó su país para jugar en el Valencia Basket, desde donde pasó a Bélgica y a la NBA, antes de recalar en el Baskonia.

Ahora, un nuevo Shengelia, nacido el pasado verano, "sorprende cada día" al jugador baskonista quien reconoce que le ha cambiado la vida, "en el buen sentido". Quien sabe si la familia Shengelia tendrá, dentro de un par de décadas, una tercera generación dedicada al baloncesto.