La luz de Howard

A verlas 'Berlín'

Abrieron el pabellón Baldwin, Cabarrot y Howard con tres triples casi seguidos mientras los alemanes estaban reñidos con la 'alemanita'. Tan solo el tosco Wetzell sacaba partido de nuestros cambios de pareja acudiendo al tiro libre. Tarde plácida de jueves entre globos bombeados y paseo con las muñecas. A los de Israel les libraba la calidad de un italiano, Spagnolo, aunque todo suene a lío entre países. Muy buena nota para Hall y Ndiaye en la intendencia reboteadora a la que siempre unen la intimidatoria sin mostrar timidez. La noche avanzaba sin esperar ningún Errejón de muerte y con los dos bases menos habituales ganándose las habas como Diop manda. Nuestra insultante superioridad técnica les provocaba más problemas que a un joven encontrar una vivienda. La grada en sus asientos como en un crucero de lujo sin marejada. Hermannsson ponía alguna gota de clase en un conjunto que en la Euroliga está a verlas 'Berlín'. Fin del primer acto sin necesidad de manicura.

En el turrón

Tras terminar la primera más relajados que en un spa en el Mar Muerto, un triple de Martin y otro de Bean nos hicieron pensar que aquello seguía vivo. Atasco ofensivo de diez que siempre solventa nuestro 0. Los balones se resbalaban sin dueño convirtiendo el baloncesto por momentos en un mal sueño. Por la puntería venida de América y Grecia conseguimos que el baloncesto recuperase su gracia. Los amarillos volvieron a las andadas, lo que nos permitió dar otro paso de gigante a la diferencia en el tanteador. Se diluía el sueño alemán por una pesadilla extraterrestre llegada de Nueva Jersey. Ya dijo Nacho Vidal eso que de meter se vive de cine. La Ertzaintza relajada porque había desaparecido el peligro. Tocaba pensar en otras cosas porque aquello ya no tenía ni pies ni cabeza. Único objetivo, terminar todos sanos en la pista y en la grada dar codazos al vecino de asiento para que se despeje. Otra al zurrón para seguir estando en el turrón.

Final

Bastó la luz ofensiva de Howard en los malos momentos, la buena compañía interior y un Nikos Rogkavopoulos con mirilla para doblegar a un Alba muy oscuro. Las muñecas se tienen o no se tienen y nunca engañan. Buena semana baskonista donde los principales no han dado el cante.