El mejor Anadolu de la década

A un partido del liderato -con siete victorias y solo dos derrotas (Zalgiris y Milan)-, si gana esta tarde (18.30 horas) empatará con el segundo. La cuatro victorias que encadena le dan confianza y en su campo se ha convertido en un equipo temible por la calidad de sus bases y la potencia de su pintura. ¿No es como muy Baskonia este Anadolu? Repasando la plantilla tampoco es raro. Larkin, Beaubois, Pleiss... Ergin Ataman revolucionó el banquillo en verano. Incorporó nueve jugadores nuevos y el meneo le salió cara -y caro, para qué negarlo-. Ahora sonríe al mirar al resto de aspirantes desde un escalón superior. Hasta Rodrigue Beaubois lo hace. Poco, no se piensen.

El francés es junto a Vasilije Micic y Adrien Moerman una de las armas que más utiliza el preparador estambulí. El de Guadalupe parece suizo. Su forma de jugar hace que sea imprevisible, pero eso es solo para resolver. Sus cadencias son como las de un reloj. En Vitoria lanzaba cinco veces de dos y cuatro de tres en 20 minutos de media. Ahora, con 25 minutos de juego, tira casi 6 veces de dos y 4,5 de tres. Y como el acierto le viene de serie, pues ahí está resolviendo partidos con una anotación de 13,4 por noche, valorando 12. Tres veces, en nueve partidos, se ha ido más allá de los 20 puntos. Como azulgrana, el año pasado solo lo hizo contra el Maccabi, en la jornada 1 (23 puntos). Su valoración media era entonces de 9,8 y su anotación de 12,1 puntos.

Vincent Poirier no deja de repetir en las redes sociales que echa mucho de menos al que era su compañero de habitación. No es el único en el Buesa Arena. Hoy será, por tanto, el momento para que Darrun Hilliard demuestre que quizá no hay que aferrarse tanto a la morriña.

El Baskonia llega a Estambul sin alero. Solo con Shavon Shields en esa posición. Otra buena razón para que el danés de Kansas se reivindique antes de que se agite en exceso un mercado que ya ha comenzado a calentarse. Así que volverá a verse el 'upgrade' por el que Granger pasa al 'dos', Hilliard y Janning al 'tres'... Miguel González podría dar algún relevo, ya que ha viajado hasta Turquía. El que no podrá ayudar es Ajdin Penava, que se ha quedado en Vitoria.

Y no es el Efes un equipo de aleros. Simon y Anderson no son malos jugadores, pero la música va por otros canales en el Sinan Erden Dome. Son Micic -a este sí que le añoran en el Zalgiris- y Moerman -al que echaron del Barcelona- los 'frontmen' del conjunto turco. Lo que le da una cierta ventaja al Kirolbet Baskonia sobre el papel. Tornike Shengelia, por muy buena versión de sí mismo que hoy dé el ala-pívot francés, es mucho mejor jugador.

En cambio, el perímetro sufrirá. La duda eterna sobre quién terminará por imponerse en la dirección del juego sigue sin resolverse. El baskonista que mejor esté se hará cargo de Micic. Si es Huertas, lo defenderá Janning, seguramente. Pero por muy bien que se resuelva ese problema, el relevo es Shane Larkin. El americano no está jugando mucho. Por algún problema físico y porque el serbio está en un estado de forma excepcional. Tampoco hay que explicar a estas alturas lo que aporta el que fuera objeto de deseo del club vitoriano durante el verano. Y para acabar de convertir un grandísmo partido de baloncesto en espectáculo de primer nivel queda la pelea entre la potencia de Dunton y el poderío de Poirier. La escuela teutona en el caso de Pleiss y Voigtmann, que tendrá que caer al 'cuatro' durante muchos minutos.

Y, lógicamente, habrá morbo. Morbo por ver a Granger y Janning -ex del Anadolu- enfrentándose a Larkin, Pleiss y Beaubois -ex del Baskonia-, o el regreso de Perasovic a un club que ha entrenado ya en dos ocasiones. Balbay, Dunston, Batuk, Motum, Bitim y Simon han estado a las órdenes del de Split. Claro que Tomislav Mijatovic, el asistente de Ataman, se sabe como pocos el 'ABC' del baloncesto de 'Peras'. Fue su segundo en las dos etapas en Estambul y dos años en la Cibona.