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El Baskonia aborda esta pretemporada la búsqueda de los destinos de cesión de sus canteranos de mayor proyección. Sin sitio en la primera plantilla y un filial lejos de la élite, el club quiere que los prometedores Ondrej Hanzlik (Praga, 2002), Pavel Savkov (Moscú, 2002) ... y Ousmane Ndiaye (Guédiawaye, 2004) se fogueen en otros equipos menores como hicieron Luis Scola (Gijón), Andrés Nocioni (Manresa) o Tiago Splitter (Bilbao Basket), entre otros.
Abonado a la paciencia para cerrar la plantilla con el «mejor base posible» en un mercado detenido por el Mundial y el afán de lograr un hueco en los entrenamientos de las franquicias de la NBA, la dirección deportiva azulgrana trabaja para encontrar los mejores equipos de acogida para los tres jóvenes que aspiran en el futuro a formar parte del primer equipo. Con tan solo el Barcelona, Valencia y el Manresa con fichajes pendientes, además de los vitorianos, las puertas de la ACB están cerradas y se aprecia a la LEB Oro como la categoría y la exigencia ideal para que el tridente continúe con su progresión.
Savkov y Hanzlik, los dos a las órdenes de Peñarroya en la pretemporada, llevan caminos paralelos. Ambos exteriores de la generación del 2002, destacaron en el filial en el curso 2019-2020 (Liga EBA). Posteriormente, vivieron dos temporadas fructíferas como cedidos en el Iraurgi y el curso pasado ambos dieron el salto a la ACB. El resultado fue diferente pero a la par similar, sin el desarrollo esperado.
El ruso rescindió el acuerdo con el Fuenlabrada a mitad de año por la falta de minutos y regresó a Vitoria, alternando entre el filial, al que no pudo salvar del descenso, y algunos minutos a las órdenes de Peñarroya en varios finales intrascendentes de partidos ligueros. También tiene el interés de algunos equipos extranjeros. El checo, por su parte, militó en el Girona a las órdenes de Aíto García Reneses, que no logró sacarle todo el cuajo. «Aún tiene que perfeccionar el tiro, que es su mejor virtud, y la defensa, pero pone mucho interés», dijo tras el partido en el Buesa Arena.
Hanzlik inscribió su nombre en el Draft de la NBA pero acabó retirando su nombre a última hora al igual que Ousmane Ndiaye, la última perla azulgrana en destacar con su selección. El 'ala-pívot' senegalés guió a su selección al próximo Preolímpico como máximo reboteador. El cuatro de 2,10 metros y 19 años fue fichado el curso pasado y quiere seguir su carrera en España para tener opciones de ser considerado cupo nacional. Para ello necesitaría un tercer año en las competiciones españolas, aunque está incluido en las primeras predicciones del Draft de 2024. Podría darse un caso similar al de Sidy Cissoko, el canterano azulgrana que este verano se marchó a los San Antonio Spurs sin casi haber debutado con el primer equipo.
Con las plantillas de los posibles contendientes al ascenso ya completas (Estudiantes, San Pablo Burgos), los tres tratan de encontrar un equipo en el que tengan espacio para jugar, equivocarse y acertar para curtirse y lograr convencer a los técnicos a su regreso, como ya hicieron Sedekerskis, Raieste y Kurucs más recientemente.
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