El baskonismo capitanea la fiesta en Badalona

Araba Etxea, la fan zone de la marea baskonista en Badalona, se ha convertido a primera hora en el epicentro de la gran juerga copera. La afición ha desbordado por completo el recinto envuelto en ese ambiente de las grandes citas. Está claro que hay hambre de título. Y el optimismo se ha podido ver en todas esas banderas que se agitaban en el cielo y las gargantas que se desgañitaban para alentar al equipo. «Baskonista soy, y siempre lo seré» o «el Baskonia, oé oé oé» retumbaban tanto dentro como fuera de la carpa. Joan Peñarroya, Rokas Giedraitis y Tadas Sedekerskis se han sumergido entre los hinchas. Sus caras de ilusión lo decían todo.

La mágica quedada se ha ido cocinando a fuego lento. Las camisetas azulgranas estaban en todas partes. Aún quedaba cerca de una hora para la 'hora H', porque la inauguración de la sede baskonista estaba programada para las 13.00. Algunos apuraban los últimos tragos en las terrazas para entrar aún más en temperatura copera en esta jornada realmente calurosa y de estreno. Y entonces, la fanfarre Biotzarratarrak ha vuelto a la carga para levantar el ánimo y reunir a la multitud. Si bien la kalejira está programada para este sábado, este viernes ya han conseguido formar una animada marcha que ha puesto rumbo al epicentro de la jarana. La celebración se ha disparado. «Estamos preparando toda una fiesta, como en todas las Copas», comentaban los directores de la juerga.

«¿Y si, sí?», se preguntaban Adrián Crespo e Iker Fernández, sobre la posibilidad de conquistar la séptima. Jon Carracedo lo tiene claro. Ha venido con su disfraz de dinosaurio desde Vitoria. Siempre le acompaña. «He traído comida para quedarnos hasta el lunes y luego ya volver», bromeaba, pero con toda la intención del mundo. Un retorno que muchos emprenderán cambiados. «Si ganamos aposté que me rapaba el pelo a cero», confesaban Aitor Moreno y Álavaro Rodríguez. Este último, por cierto, ha venido desde Eslovaquia únicamente por animar a «mi Baskonia» en el torneo. «Somos la mejor afición», resumía su amiga Ainhoa Valle.

La fiesta ha subido unos grados más cuando los jugadores y el entrenador se han presentado en la carpa. Y claro, además de alentar a los jugadores para alcanzar la gesta, también le han dedicado varios cánticos al míster, el encargado de conducir el autobús baskonista hacia el título. «Peñarroya, Peñarroya, contigo ganaré la Copa», ha sido un clamor, a lo que él respondía agradecido. Tras el brindis oficial con una copa de vino, los protagonistas han posado con los aficionados que han querido inmortalizar este momento siempre especial. La siguiente parada será en el interior del pabellón Olímpico de Badalona.