Se cae Hall, emergen Diop y Ndiaye

«Se torció el tobillo en el entreno del lunes en la última jugada. Ha hecho un esfuerzo brutal para jugar pero al descanso me ha dicho que no podía más», explicó Laso. La baja del MVP de la última jornada de la ACB dejaba muy mermado el juego interior en el peor día, ante un Tavares que mejoró en la segunda mitad tras mostrarse algo desquiciado en la primera. En las dificultades, emergieron el mejor Khalifa Diop y un Ousmane Ndiaye que ya arrancó bien el partido junto a Hall y que tuvo que hacer por momentos de pívot para dar un respiro a su compatriota.

La defensa que el técnico venía haciendo en varias ruedas de prensa de aquellos jugadores que menos protagonismo estaban contando albergaban dudas de que fueran las de un entrenador muy convencido de las proyecciones de su futuro. Sin embargo, ya advirtió el sábado tras ganar al UCAM Murcia de que la salida de Ousmane Ndiaye «no era un regalo» y anoche volvió a usarle de inicio. La respuesta del senegalés de 20 años fue jugarse un triple cuando tuvo el espacio y luego anotar los primeros 4 puntos del equipo en su bautizo en la Euroliga.

«Ha hecho buena pretemporada y me ha costado meterlo», reconoció ayer Laso sobre el joven, que dejó patente su bisoñez con la bomba que dejó con más miedo que vergüenza para anotar la canasta inicial ante Tavares. A la siguiente acción, fintó el triple, llevó al poste bajo a Musa y aprovechó su superioridad para anotar a la media vuelta. Pleno de fundamentos. Tan bien le vería Laso incordiando a Tavares en la lucha por el rebote con sus brazos kilométricos que, entre tanta rotación, le mantuvo en pista hasta 6 minutos, con una notable ovación.

Para entonces ya estaba Khalifa Diop en pista. La noche inaugural del curso pasado ante el Real Madrid fue su única alegría del año y ayer volvió a hacer un gran partido. El más valorado al descanso hasta acabar con 8 puntos (importante canasta desde cinco metros para entrar 72-70 en el último minuto), 7 rebotes y 15 de valoración. «Khalifa el año pasado tuvo muy mala suerte. Lo fácil es decir que no le ponían… pero es que estaba lesionado», explicaba ayer Laso.

Diop también exhibió falta de confianza en algunas jugadas de 'pick and roll' y lagunas en defensa, pero dio un paso al frente y mantuvo la solidez en las inmediaciones del aro. «¿Va a jugar así todos los días?», se preguntaba Laso en rueda de prensa. «No. Ojalá. Tendrá días malos porque tiene aspectos a mejorar. En alguno lo mataría, pero veo que mejora», decía el técnico.

El pívot, por su parte, esbozaba una sonrisa tan amplia como Portal de Zurbano. «Vuelvo a disfrutar», aseguraba tras el choque. «Ha sido un partido excelente, sobre todo grupal. Yo estoy trabajando cada semana para volver al ritmo que tenía antes y estoy muy contento con el trabajo del entrenador. Tiene mucha paciencia y eso es bueno», declaró tras apuntar que la clave ante Tavares era «anticiparse». Ese paso al frente que necesitaba.