Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
No deja de sorprenderme eso de que los que más ganan se ofendan de la subida del salario mínimo. Siempre he tenido meridianamente claro que una vida digna no tiene precio. Que saliera cara y no cruz es a lo que aspiraba el Baskonia jugando ... con el pijama de casa.
Nos visitaba el Panathinaikos con su hospital de campaña. Nosotros, como en esos sitios donde no cabe un alfiler, al completo. Empezaron queriendo dárnosla con queso, lo que mejor marida con el 'Bacon'. Triple de su americano entre subidas y bajadas sin beneficio, no como los bancos. Disparos baskonistas de fogueo que obligaban a Joan a llamar a capítulo a los suyos.
Los de Radonjic Lee estaban dando un baño ofensivo al Baskonia que empezaba a preocupar. Williams se sumaba al festín mientras la defensa de Kalaitzakis aguaba la de Thompson. Demasiados problemas en el uno contra otro a lo que se sumaban sus tempranas visitas al tiro libre. La entrada de Costello unida a las que se generaba Howard nos permitieron cortar la hemorragia para que la sangre no llegase al Zadorra.
Matt, como de manera habitual, hacía de termómetro en noche fría, Kotsar calentaba la pintura y ya éramos 'Max' para saltar la primera 'Vanja'. Cada vez tengo más claro que cuanto menos te pitan, mejor se defiende. Subimos al piso 14 de la mano de Markus Howard y desde allí oteamos las 'Rokas' y sus pedradas.
Estábamos avisados, por lo que seguro que Peñarroya pidió a sus jugadores añadir una 'p' intermedia a la segunda palabra. Y así fue, dos 'Costelazos', cuarta de su mejor hombre y picotazo local que comenzaba a oler a 'Pana'. Los veinte, que siempre se recuerdan, aparecieron en nuestro casillero casi sin darnos cuenta. Pero los del trébol empezaron a hacerse mayores y se dieron cuenta que de los desperdicios puede sacarse provecho. Derrick volaba sobre las cabezas vitorianas cuando las ayudas la perdían y así redujeron diferencias. Dos triples de Markus y Marinkovic evitaban tener que llamar al médico preocupados por la tensión.
Ellos estaban para rezar lo que hizo despertar a su 'Papa'. Mucha goma griega que no tenía pinta de estirarse. Impecable aparición de Dani, que no vaga ni es vago entre aros, con copia y pega de Maik. Heidegger daba ese descanso con garantía y ojos que tan bien sienta a nada que tengas un poco de vista. Agradecidas visitas a la soledad del libre, pitos, parones, 'reboTadas', salmos y 'Thomp y son' para sumar otra sin apuros.
Un Baskonia hogareño vuelve a dejar cerrada, a otro visitante, la puerta de casa. La rasca de fuera se minimiza al calor del Buesa. Una victoria más y una jornada menos para seguir en la zona caliente.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.