Se queda Tadas, uno de los nuestros
La renovación del lituano, quien encarna los principios rectores del club azulgrana, representa una conexión con las raíces dentro de un baloncesto globalizado
Ángel Resa
Martes, 5 de marzo 2024, 00:36
Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
Ángel Resa
Martes, 5 de marzo 2024, 00:36
Tratar de contener la globalización metidos ya en el tercer milenio se parece a la tarea inútil de resistir la fuerza destructora de un alud con los cuencos de las manos. Pero aceptando incluso lo inexorable, noticias relativas a la permanencia en el tiempo de ... alguien importante tienden a reconfortarnos como sociedad. Y, en términos deportivos, la extensión contractual de Tadas Sedekerskis hasta ¡2029! saben a fértil y gratificante conexión con la tierra.
Una mirada a las raíces sin caer en el aldeanismo de vía estrecha. Las peculiaridades físicas que requiere el baloncesto obligan a picar piedra humana donde corresponda. Asunto en el que el Baskonia luce distinciones académicas de 'cum laude' después de abrir mercados ignotos hace más de tres décadas –como el caladero argentino– mediante el arrojo visionario de los pioneros, importar aquellos productos y forjarlos en la fragua de Betoño.
La rica cinematografía basada en familias mafiosas ha popularizado expresiones como 'uno de los nuestros'. Y no hace falta recurrir a un mundo drástico y letal para afirmar que la permanencia del 'tres y medio' lituano en Vitoria bien encaja en semejante modo de entender los vínculos de pertenencia, tan relevantes en la vida social. Tadas llegó a la capital alavesa siendo un adolescente y acaba de renovar las promesas del baskonismo por otro lustro suplementario en la edad de la madurez.
Noticia relacionada
Carlos Pérez de Arrilucea
Sedekerskis lleva camino, senda vitoriana más bien, de alcanzar el rango de icono en el altar de la causa azul y granate. Como le sucedió en su día a Luis Scola, apóstol mayor de la entidad de Zurbano, al evangelista Tiago Splitter o a Toko Shengelia, otro que prolongó su estancia hasta agitar el pañuelo del agur con la ACB de la burbuja debajo del brazo.
Porque el capitán por fin, que ya quería el brazalete del carnero en la última temporada de su compatriota Rokas Giedraitis bajo el techo elevado del Fernando Buesa Arena, encarna los principios rectores del club. Aquellos que recuerdan los estandartes de gran tamaño en el recinto de Betoño condensados en eslóganes certeros. Tadas refleja el orgullo, el compromiso con la causa, la solidaridad del jugador generoso y el esfuerzo constante. Sin duda, el soldado universal con el que Dusko acudiría a cualquier conflicto deportivo.
Se me ocurre otra virtud de irrebatible valor añadido al pensar en el ala-pívot báltico. Me refiero a la fortaleza mental para sobreponerse a cesiones sucesivas –alguna ingrata como la de Burgos– y al empeño por no caer en el abatimiento por su involución involuntaria a la vera de Neven Spahija. Un fundido a negro del técnico croata al chico de la cantera que tanto malestar causó en el club.
La renovación de Tadas constituye la mejor manera de empezar la semana tras los síntomas recientes de crisis deportiva. Supone la certeza de nutrir dentro del hogar al sujeto de deseo de buques de gran eslora que faenan por Europa entera. De conservar a un baloncestista moderno y total. De retener a un emblema que trasciende su condición de jugador. 'Uno de los nuestros'.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
A la venta los vuelos de Santander a Ibiza, que aumentan este verano
El Diario Montañés
Fallece un hombre tras caer al río con su tractor en un pueblo de Segovia
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.