El alto nivel de baloncesto disimula la falta de ambiente copero

A tenor por las indumentarias del graderío, la del Unicaja fue la afición mayoritaria en la jornada de ayer. La culé también se hizo notar, pero quedó enmudecida con la derrota. «¿Dónde están los del Barça?», cantaban con sorna los aficionados andaluces durante la celebración de un triunfo memorable que obligó a los jugadores de Ibon Navarro a volver a saltar a la pista.

Para entonces, los seguidores blaugranas ya estaban en el exterior labrando otra dura batalla. La lucha por subirse al taxi, reserva mediante o no, apunta a ser despiadada. De momento, sin contacto, pero dos personas le comentaron al ahora comentarista de televisión Germán Gabriel que de jugador no defendía tanto. En medio de un clima nocturno que cala en los huesos.

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El inicio de la Copa de Badalona fue frío. Con más de 3.000 asientos vacíos durante el primer partido y sonido ambiente que no empezó a subir los decibelios hasta que el banquillo del Valencia pidió ayuda en su intento de remontada. Hasta entonces, la atmósfera solo se alteraba de cuando la palma de las manos de Tavares y Poirier impactaban sobre el balón, negro y blanco para la ocasión.

Faltó ambiente copero y juvenil. Apenas se veía gente joven en las gradas. Ni siquiera en las barras de la 'fan zone'. Los precios de los abonos, desde 150 euros a 700, disuadieron a muchos. La ACB hace esfuerzos para tratar de llenar el Olímpic en los días venideros. El precio de las entradas para un solo día ayer bajaron de 96 a 74. Hoy ya se espera una mayor asistencia, pero todavía lejos de colgar el cartel de no hay billetes.

El excelso nivel de baloncesto exhibido este jueves y que se espera para el resto de las jornadas ayudará a mejorar el ambiente. También la presencia de famosos. Ayer, tan solo los jugadores del Espanyol Sergi Darder y Nico Melamed fueron las 'celebrities' que desfilaron por la grada. El resto, gente vinculada al baloncesto. Como los 'youtubers' Vituber o Aircross, el periodista Quique Peinado y lo más granado de las agencias de representación de jugadores. Desde los más pequeños como Sergi Vidal hasta el que más abarca, Misko Raznatovic, que sacaba pecho al final tras la canasta ganadora de Kendrick Perry, uno de sus representados.

El serbio tiene jugadores en todos los equipos menos en el Baskonia, que esta tarde estará representado por mil alaveses que levantarán el ánimo de una Copa que el primer día solo se alborotó sobre la pista.