Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
Soy de letras pero entiendo que cuando la vida sube un 10%, los que pierden matemáticamente y sufren más siempre son los que menos tienen. Restar a la pobreza es una auténtica miseria. Rico en baloncesto queríamos seguir viendo a un Baskonia que salvo por ... Lourdes o Fátima se despedía anoche de Europa hasta la próxima edición.
Día frío en Gasteiz que para un lituano debe de ser como uno de manga corta y bermudas por Kaunas. Molestias en el hombro de Wade Baldwin que hacían cambiar el quinteto a última hora para ir pensando en los que vienen de una isla con sesenta minutos de retraso.
Salimos calientes de cara al aro a pesar de lo gélida que estaba la tarde. Aciertos de Matt y Rokas que obligaban a pedir a nuestro entrenador rival su primer tiempo muerto seguro que cabreado aunque no 'Jure'. Buena dirección de Granger entre balones compartidos, algunas carreras agradecidas y primeras ventajas con olor a soba. Muchos 'Mantas' vestidos de blanco y verde a los que los azulgranas hacían canasta en jornada de entrenamiento. Nos fuimos de veinte como el que sube la gasolina cuando baja de precio.
Enoch sacaba brillo a los techos, los buenos aleros baskonistas tenían más peligro que Will Smith en una gala mientras Peters hacía gala de su clase, valga la redundancia. Ante semejante baño, Spahija se podía permitir el lujo de sentar a sus principales junto al agua ya que la diferencia de calidad entre uno y otro equipo era como del H20 al vino. Viendo a los lituanos recordaba a los magos con su famosa frase: 'Nada por aquí, nada por allá'. Avanzaba el minutero entre libres, acierto de locos y suplentes locales con 'minuTadas' en tarde de palomitas.
Daba verdadera lástima ver a un histórico del baloncesto europeo deambular por la cancha. ¡Si Sabonis levantase la cabeza! Bueno, igual se pegaba con la cabeza en el aro y tampoco es eso. Por algo de vergüenza en Lekavicius y Lauvergne, unido al relax propio del que jugaba en un balneario se fueron al descanso sin un resultado de escándalo 'Raphaeliano'.
Seguíamos con la mirada en Múnich ya que lo de Gasteiz parecía visto para sentencia. Jayson continuaba haciendo de Baltasar regalando pases en vez de caramelos que a Costello le sabían a gloria. Continuaban los de Zdovc bajando a su aro en taca-taca lo que sorprendía, en un baloncesto que se supone de nivel, a los más viejos del lugar. El joven Lokosiunas era el más cuerdo mirando el aro vitoriano a la par que perdíamos algo de raciocinio ofensivo para permitir que bajasen de la barrera veinteañera.
Por suerte, su defensa recordaba a ese preservativo que anuncian: invisible. Entre los robos, continuaciones y carreras de Matt, su cruz ofensiva más propia de Semana Santa y la diferencia sideral de calidad si hablamos de quintetos, volvíamos a las andadas pero casi siempre corriendo. El rebote local de Día del Blusa, o sea una fiesta, con los del Zalgiris mirando el paseíllo. Ya era noche cerrada, más o menos como el partido.
El personal, haciéndose las uñas porque lo de comérselas quedaba claro que se guardaba para otras jornadas. Minutos y minutos de camión de la basura de donde no podrían sacar conclusiones ni un cónclave de matemáticos. Hacía tiempo que no veía a un equipo tan vulgar paseando su camiseta por la mejor liga europea. Minutos para todos en partido más propio de la Paz y la Amistad que del Buesa. Ensalada de puntos para todos, lamentables de sutura para Raieste, y plegarias a quien correspondiera para que aquel simulacro de contienda finalizase sin bajas. Punto final a una Euroliga sin rusos y ni pena ni gloria.
Adiós con baño de un Baskonia abusón ante un Zalgiris menor. Tarde de paseo aunque el tiempo no estaba para darlo y minutos para todos sin poner 'Barrera'. A establecer el 'focus', como dice Neven Spahija, en la liga, que es donde tenemos que intentar dar más de cuatro latas. Europa ya es ayer y Fátima está en Portugal.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.