El 1x1 del Baskonia frente al Granada. El mejor, Howard. Y tú, ¿quién crees que ha destacado?

Movió el equipo azulgrana con sentido común en una tarde relativamente apacible. Se encomendó a la puntería de Howard y corrigió la hemorragia del rebote defensivo hasta el descanso con la abundante presencia de un sobrio Costello a la vuelta de los vestuarios.

Otra muestra monumental de su enorme talento ofensivo. Batió su récord triplista con diez aciertos en catorce intentos y volvió a meter los mismos puntos (37) que el domingo pasado al Barça.

Es tan sólido que hasta luce desde la discreción sin estar en su mejor momento. Diez asistencias y un tapón monumental al ala-pívot Wiley cuando el visitante trataba de hacer un mate.

Volvió con buen pulso. Repartió un par de asistencias tensas. Aprovechó el momento bajo de Theodore tras varios partidos sin minutos.

Bastante participación en tan sólo 82 segundos, los últiso del partido, sobre la pista. Falló un triple, dio una asistencia y recuperó un balón.

No está en una buena fase el base suplente del cuadro vitoriano. Se cargó de faltas y Chiozza le superó en presencia sobre la cancha.

Otra tarde compartiendo quinteto inicial con Howard. Muy buen arranque en ataque y menos minutos de los habituales. Contribuyó a la causa triplista con dos dardos.

Por debajo de su muy notable nivel esta temporada. Se mostró poco ante el aro granadino y lejos de su voracidad reboteadora ante un adversario que profanó el tablero local hasta el descanso.

Siempre asume las tareas más ingratas y la estadística de ayer no le rinde justicia.Trabó todo lo que pudo el ataque visitante.

Solvencia de veterano y conocedor del oficio. Anotó todo lo que lanzó a canasta –suma precisión con pocas balas gastadas– en un encuentro donce rozó los diecinueve minutos.

Sigue de baja por un proceso vírico.

Otro ejemplo más de su producción inmediata. Aporta según pisa el parqué. Veinte puntos en otros tantos minutos. Extrae faltas personales en cadena. Flojo en el rebote hasta el descanso.

El protagonista principal para cerrar la hemorragia que el equipo andaluz causó hasta el intermedio con sus rebotes ofensivos. Sobrio, eficaz y el mejor escudero del dúo Howard-Moneke.

Flojo partido del pívot estonio. Dominado bajo los tableros y con escasa presencia en el ataque. Una cruz en los tiros libres desde que los lanza con la mano derecha.