Las vistas a la gabarra ya cotizan en los balcones de Bilbao

La práctica no es nueva. El alquiler de terrazas es conocido en otras comunidades de cara a las procesiones de Semana Santa, o en los 'sanfermines' de Pamplona. Tanto que desde hace siete años la Hacienda de Navarra envía cartas informativas para recordar las obligaciones tributarias que supone el rendimiento de estos espacios.

En Bizkaia las oportunidades han sido menores, pero no inéditas. El verano pasado hubo quienes exploraron este mismo mercado con la primera etapa del Tour de Francia. Los internautas calificaron algunas de estas ofertas como «desorbitadas» porque elevaban el coste de los balcones desde los que ver la competición hasta los 600 euros.

Ahora la esperada travesía de la gabarra, cuarenta años después de que surcara un Nervión con aguas bastante más turbias y olorosas, parece haber despertado un mayor interés entre la demanda que en la oferta. En las redes sociales son varias las personas que buscan un asiento para ver pasar a los protagonistas del título de Copa, y en las plataformas de anuncios se han materializado otras que solicitan pisos «con vistas a la ría» para el próximo día 11. «Sería para el alquiler del balcón y poder visualizar la ría al paso de la gabarra. Capacidad para al menos 3 ó 4 personas. Precio a convenir», reivindica una de las primeras en publicarse. En otra de estas solicitudes, para ocho personas, ponen en valor su seriedad y la 'solemnidad' del evento. «Iríamos ocho personas, pero no para montar fiesta ni mucho menos», prometen. Su objetivo, reclama el clasificado, es estar «tranquilamente disfrutando del ambiente que veremos en la calle».

A la hora de buscar espacios privilegiados pocos pueden compararse al Puente Colgante. Quienes durante los últimos días hayan intentado reservar un pase para recorrer la plataforma entre Portugalete y Getxo se han encontrado con que la opción para este jueves está desactivada. «El aforo es de 50 personas y está limitado a través de los ascensores, donde hay personal. Si no, sería un caos», detallan en el Transbordador de Bizkaia, donde esperan a los próximos días para anunciar cómo se gestionará su uso.

«Gente de aquí»

Al lado de este gigante férreo, en la villa jarrillera, el Boutique Hotel Puente Colgante también suma unas terrazas que se asoman a la ría. «En el momento en el que se dijo que el paso de la gabarra podría ser el 11 se reservaron todas las habitaciones con balcón. Eran peticiones de gente de aquí», detallaron en las instalaciones, donde también advirtieron que el 90% de los alquileres se realizaron «con opción de cancelación».

Pese a la confianza de la hinchada, la opción de cancelación no resultaba baladí hasta que se resolvió el trance de infarto que supusieron los penaltis. Hasta ese momento la salida de la gabarra era una suerte de 'gato de Schrödinger'. En el mismo limbo se venía resolviendo la gestión del negocio de algunas terrazas tan apreciadas como las del hotel Abba Euskalduna, donde se negaban a valorar la utilización de estos espacios hasta entrado este lunes, cuando la 'fiesta' rojiblanca ya estuviera confirmada.

En el bar del Cargadero de Bilbao, cuyo suelo flota sobre la ría, ya llevan tiempo cerradas las reservas. Su gerente, Javi Porta, advirtió que si la Copa se venía para Bilbao, el embarcadero acogería un evento «a puerta cerrada». «Será para colaboradores y clientes», avanzó. Aunque hay más alojamientos que permitirán acercar la vista a la gabarra, como el Hotel Vincci Consulado, donde reconocieron que habían recibido una demanda «mayor de la habitual» para el jueves. «Desde que se anunció la fecha ha llamado mucha gente, sobre todo del entorno de Bilbao. Imagino que estará pasando algo parecido en todos los lugares con vistas a la ría», predecían tras su mostrador. Esto es algo que también se pude apreciar comparando los precios de hoteles cercanos al Nervión entre la noche de este jueves pasado y el que está por venir. El coste de una reserva on line para una habitación se dispara en un 'clic' de los 95 euros hasta los 196, o desde los 115 euros hasta los 330 (incluso 440 para una amplia habitación individual con vistas hacia el Guggenheim). Todas a la espera de que las gargantas vuelvan a sonar a 'Alirón'.

Tributar a Hacienda

En las calles la victoria del Athletic suena a fiesta y a ilusión, pero el próximo año la celebrada en terrazas de alquiler también debería sonar a impuestos. En la Hacienda vizcaína recordaron que el arrendamiento de los balcones es una «operación sometida al IVA, que no está exenta porque no se trata de arrendamiento de vivienda. Además, debe declararse en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) como rendimiento de capital inmobiliario, aunque sea una cosa ocasional», recuerdan.

Esta circunstancia, eso sí, no hace obligatorio entrar en el Batuz -el programa de control de la tributación para empresas y autónomos-, ya que no produce un rendimiento de actividades económicas en la renta. Quienes alquilen estos espacios, eso sí, pueden solicitar un contrato por escrito en el que se justifiquen los gastos y los ingresos