Undécimos octavos de final de la Europa League

Los hombres de Valverde han completado una magnífica fase de liga que les ha permitido acabar entre los ocho primeros y evitar el molesto play-off de febrero correspondiente a los dieciseisavos de final. Entran directamente en octavos, una ronda del segundo torneo europeo que pisaron por primera vez en la temporada 1964-1965. Entonces superaron al Dunfermline en la Copa de Ferias en tres partidos, pero no pudieron en cuartos contra el potente Ferencvaros. Tres años más tarde, los rojiblancos repitieron eliminatoria y de nuevo se estrellaron contra el mismo rival. Perdieron en Hungría (2-1) y también en San Mamés (1-2). Al curso siguiente, los parroquianos de La Catedral vieron la idéntica película en cuartos, solo que el verdugo fue el Rangers.

La campaña 1976-1977 fue memorable porque el Athletic alcanzó las finales de Copa y Copa de la UEFA. Era su primer cruce por un título continental y lo perdió ante la Juventus. Regresó de Italia con una derrota por la mínima (1-0) y ganó en San Mamés (2-1), pero no fue suficiente. En octavos eliminó al Milan, en cuartos al Barcelona y en la semifinal al Molenbeek belga. Al año siguiente se plantó entre los 16 mejores, como ahora, y cayó con el Aston Villa (2-0 allí y 1-1 aquí).

Los octavos volvieron a ser un muro infranqueable en el curso 1985-1986, cuando los rojiblancos quedaron eliminados ante el Sporting de Portugal, y en el 1994-1995 ocurrió lo mismo frente al Parma. Hubo que esperar casi dos décadas para repetir entre los 16 mejores, pero entonces los bilbaínos fueron una apisonadora. Se cargaron al Manchester United (1/8), Schalke (1/4) y Sporting de Portugal (1/2) para meterse en la final perdida ante el Atlético.

Alcanzaron los cuartos en 2016, donde cayeron en la tanda de penaltis frente al Sevilla. Y en 2018 fue el último capítulo continental de una Europa League que ahora asoma de nuevo imponente en el horizonte.