Simón y Agirrezabala: dos grandes porteros para un solo puesto

Nadie recuerda un momento similar al que atraviesa en estos momentos la portería rojiblanca. Lezama, inagotable factoría de talento bajo palos, resulta hoy más que nunca un motivo de orgullo con la presencia de Unai Simón (Murgia, 1997) y Julen Agirrezabala (San Sebastián, 2000). Uno de los mejores porteros del mundo, consagrado en la élite y dueño de la meta de la selección española, y una joven promesa que este año ha aprovechado al máximo sus contadas oportunidades desde que ascendiera al primer equipo en la 2021-22 para convertirse en realidad. El beso del alavés al donostiarra en la celebración del título de Copa habla de la gran relación que mantienen y el respeto que se profesan; pero se trata de un ecosistema, el de contar con dos guardametas de primer nivel, raro en el fútbol y difícil de gestionar para el club.

Al margen del Real Madrid, que con la baja de larga duración de Thibaut Courtois en verano se lanzó a por un relevo de garantías como Kepa Arrizabalaga ante las dudas, luego silenciadas, sobre Andrey Lunin, prácticamente nadie cuenta con dos (tres en el caso madridista tras la recuperación del belga) porteros de plenas garantías. El Athletic sí, y una situación así se convierte en un arma de doble filo. Por un lado supone un alivio saber que en caso de lesión o sanción el relevo estará a la altura. Por otro, se produce una encrucijada para el entrenador. Desde su llegada en 2022, Ernesto Valverde ha confiado la Copa a Agirrezabala, al igual que hizo un año antes Marcelino García Toral. Resultado: dos semifinales y un título. Intachable. ¿Qué sucederá después del verano, en una temporada en la que el Athletic afrontará cuatro competiciones tras la vuelta a Europa y otra Supercopa?

La reciente renovación de Simón hasta 2029 sin cláusula de rescisión permite respirar al aficionado, siempre temeroso de que el grande de turno seduzca al alavés, que afrontará en dos semanas su segunda Eurocopa, el mejor de los escaparates. Antes de estampar su firma, su contrato vencía en 2025, dentro de un año, al igual que el de Agirrezabala. Según ha podido saber este periódico, el club desea que el guipuzcoano continúe ligado a la entidad varios años más y la voluntad del jugador está en la misma dirección. Mientras que el internacional español lleva un lustro instalado en la élite, el jugador formado en el Antiguoko ha derribado la puerta esta campaña.

Su rendimiento ha contribuido a la consecución de la Copa cuarenta años después. No sufrió demasiado hasta los cuartos, cuando frenó las embestidas del Barcelona ante el empuje de San Mamés. Después secó en ambos partidos al Atlético y en la final contra el Mallorca detuvo el lanzamiento de Manu Morlanes en la tanda después de una soberbia actuación durante los 120 minutos. En definitiva, su Copa ha sido la confirmación de su calidad y brillante futuro. Muchos se cuestionan la idoneidad de tener a un portero de su talla condenado al banquillo en Liga y a disfrutar de, como mucho, ocho encuentros en el torneo del k.o. en el caso de llegar a la final, además de excepciones como el día del Bernabéu, donde Txingurri le quiso dar rodaje antes de la final, o los tres partidos –solo uno completo, el del Sevilla– que ha disputado en las jornadas finales para que Simón se hiciera con el 'Zamora'.

En las últimas tres Copas, Agirrezabala lo ha jugado todo y Simón, que no se pone el parche de la Federación desde la final con el Barcelona en 2021, nada. Son veinte partidos pero podrían haber sido, si hubiese ido mal, menos de la mitad. ¿Aceptaría jugar dos, tres partidos, alguien que podría ser titular indiscutible en la inmensa mayoría de equipos punteros? Son dudas que el tiempo resolverá y un riesgo que quiere asumir quien cumplirá 24 años en diciembre. Simón soplará 27 velas en junio. En el currículo del donostiarra hay también 16 compromisos ligueros. A los cuatro de esta temporada se unen ocho de la anterior, fruto la mayoría de la lesión en el tendón de Aquiles que sufrió Simón. En la 2021-22 el de Murgia tuvo descanso en las dos primeras jornadas de Liga por su exigente verano –Eurocopa y Juegos Olímpicos– y se perdió otras dos por coronavirus.

La clasificación del Athletic para la próxima Supercopa de España le eximirá de las dos primeras rondas de Copa. De alcanzar de nuevo la final, Agirrezabala solo disputaría seis encuentros al margen de las migas que pueda disfrutar en el campeonato doméstico. ¿Y Europa? Es de suponer que el técnico de Viandar de la Vera recurrirá a Simón ante la incredulidad que levantaría regresar a competir por el Viejo Continente con tu portero suplente. «Confiamos tanto en él como Unai (Simón) y es una suerte increíble contar con estos dos porteros», lanzó el míster.

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