Iñaki Williams. A. C.

Los seis jugadores del Athletic vuelven a dar positivo y tendrán una pretemporada mínima

Deben superar dos tests en 72 horas antes de entrenar con el grupo y contarán con solo dos semanas de preparación

Martes, 25 de agosto 2020

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Pésimas noticias para el Athletic y su entrenador, al que se le complica aún más una pretemporada cargada de dificultades. Los seis jugadores del Athletic afectados por el coronavirus -Iñaki Williams, Unai López, Unai Núñez, Iñigo Córdoba, Oihan Sancet y Gaizka Larrazabal- han ... vuelto a dar positivo en, al menos, uno de los dos análisis que se les han realizado el viernes y el lunes, lo que les impide integrarse a los entrenamientos.

El Athletic indicó en la tarde de ayer que estos futbolistas «continúan con su trabajo individual en sus domicilios después de que los últimos análisis de las pruebas PCR no les permitan integrarse en Lezama». Corren y hacen pesas (como han mostrado Williams y Unai Núñez en las redes sociales), pero no tocan balón ni trabajan con sus compañeros.

Los seis rojiblancos dieron positivo el pasado 13 de agosto en las pruebas previas al regreso a los entrenamientos. El protocolo de la Liga, que es quien efectúa los análisis, obliga a los clubes a aislar a los afectados en sus domicilios durante diez días y someterles después a pruebas de PCR. Si dan negativo en dos test seguidos con el plazo de 72 horas, pueden incorporarse a los entrenamientos. No ha sido así en ninguno de los seis rojiblancos.

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El club, que limitó su referencia a estos jugadores a apenas tres líneas de nota de prensa, no aclara si los seis han dado positivo en las dos pruebas, realizadas el viernes y el lunes, o alguno de ellos ha resultado negativo en la segunda.

Entrenar sin 11 futbolistas

Desde esa última prueba deben esperar otras 72 horas para hacerse la siguiente, que será el jueves. Si alguno hubiera dado negativo en la del lunes y repite ese mismo resultado, podría entrenar ya el viernes o el sábado en Lezama. Los que ese lunes volvieron a ser positivo, deberán superar un segundo test el domingo y no regresarían al campo al menos hasta la próxima semana.

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Lo sucedido supone un duro golpe para la planificación de la temporada. Los afectados tendrán como mucho dos semanas de preparación antes del primer partido de Liga, previsto para el 12 de septiembre. Es además muy probable que ni siquiera jueguen en pretemporada. El último amistoso es el día 5 del próximo mes ante el Eibar en Lezama.

La situación se agrava para el técnico porque la mayoría de ellos forman parte de su columna vertebral. Williams, Unai López y Córdoba fueron parte de su once tipo la pasada campaña. Núñez fue, entre los no titulares, uno de los más utilizados y el plan del entrenador era aumentar el protagonismo de Sancet. Del grupo de infectados, sólo Larrazabal es un jugador de segunda línea, al punto de que se valora que salga cedido.

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Garitano confiaba en un pronto regreso de los jugadores infectados por el Covid-19, pero se ha encontrado con que no es así y que para agravar la situación sufre otro gran número de bajas. Cinco jugadores -Berchiche, Iñigo Martínez, Ibai Gómez, Vivian y Nolaskoain- sufren distintos tipos de lesiones, que les impiden ejercitarse con el grupo. A 18 días del arranque de la Liga, el entrenador trabaja con un grupo en el que hay diez jugadores con ficha del Bilbao Athletic. Y para que la sensación sea aún peor la próxima semana su portero titular, Unai Simón, se va con la selección española.

Según desveló este periódico, el «posible brote», como reconoció la consejera del Gobierno vasco Nekane Murga en rueda de prensa, se sitúa en la velada de boxeo que se celebró el sábado 8 de agosto en Puerto Banús, que tenía como combate estelar el que protagonizaron Kerman Lejarraga y Tyrone Nurse y que concluyó con victoria del púgil de Morga.

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Al menos así lo habrían asegurado a los rastreadores de Osakidetza varios de los jugadores del Athletic. Según su relato, cuatro de los futbolistas afectados asistieron a la velada, celebrada en la plaza de toros y bajo estrictas medidas de seguridad -de las más de 5.000 localidades existentes se restringió el aforo a 1.200-. Al menos otro jugador más estuvo en Marbella, aunque no asistió al combate.

Desde la entidad han trasladado su apoyo a los jugadores afectados. «Es una mala noticia, pero no hablaría de negligencia», les defendió cuatro días después de los positivos el jefe de los servicios médicos, Josean Lekue.

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