Meses después de haber ocupado una butaca en el palco de San Mamés, en enero, en el derbi ante la Real, el boxeador Sandor Martín, seguidor ferviente del Athletic, pudo vivir este sábado otra noche mágica en La Catedral. Y eso que en esta ocasión no terminó de la mejor manera posible ni para él ni para los jugadores comandados por Ernesto Valverde, ya que sumaron una dolorosa derrota por la mínima en el descuento del duelo ante el Atlético.
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El púgil de Barcelona, número 1 del Mundo y tres veces campeón de Europa (EBU) de peso superligero entre 2019 y 2021, fue el encargado de lanzar el saque de honor, un homenaje recibido por el Athletic por hacer gala siempre de su afición por el club rojiblanco. Un reconocimiento que además le ha servido de impulso antes de luchar en noviembre en EE UU por el título mundial.
Sandor, vestido con un impoluto traje negro y sin corbata, bajó al verde para, con todo ya preparado, chutar con la izquierda el balón, demostrando que posee un gran golpeo. Con todos los jugadores del Athletic aplaudiendo tras él, nada más darse la vuelta se fundió en un sentido abrazo con Iñaki Williams, antes de hacer gestos de 'ok' con ambas manos, mirando a la grada y aplaudiendo con orgullo a la afición, levantada en pie para rendir así también su particular homenaje al que es uno de los suyos.
Tras el partido, que a buen seguro le dejó un sabor tan amargo como a los propios jugadores, el boxeador volvió a pisar el césped de San Mamés, y allí recibió una camiseta con el dorsal 10 a la espalda y con su nombre, con la que seguro que saltará al ring de alguno de sus próximos combates, algo que ya ha hecho en más de una ocasión. Además, Sandor también pudo volver a saludar a los jugadores, tras pasar por estos vestuarios, compartiendo risas con Nico Williams, quien minutos antes había hablado por primera vez frente a una cámara sobre su continuidad en el Athletic, con el que tiene ganas este curso de «disfrutar en Europa», asegurando además que su corazón «es rojiblanco».
Tras este encuentro, y con San Mamés ya casi vacío, el púgil catalán quiso lanzar un mensaje de ánimo a los de Valverde, que el club compartió en sus redes sociales. «Muchas gracias por el apoyo que me habéis dado en San Mamés. Pese a que el resultado no ha sido el esperado, creo que este equipo está trabajando muy duro y nos va a dar alegrías esta temporada. Así que vamos a seguir apoyando a nuestro Athletic como toda la afición sabe».
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El amor por el club rojiblanco le viene de lejos a Sandor Martín. Sus dos abuelos y su padre fueron los artífices de que entendiera la idiosincrasia del Athletic y se enamorara del club bilbaíno. Su gran ídolo es Julen Guerrero, y también siente especial afinidad por Muniain, ya que como ha afirmado en alguna ocasión, ambos son «de la misma quinta». El pasado 22 de agosto cumplió 31 años. El púgil, que desde adolescente practica boxeo, siempre ha tenido predilección por el deporte, llegando a practicar baloncesto y también fútbol en su infancia. Después de muchos años de trabajo y esfuerzo ahora su sueño no es otro que lograr el cinturón de campeón mundial.
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