Fin a la mala racha del Bilbao Athletic

La contienda comenzó igualada. El Navalcarnero fue el primero en avisar, con un gran lanzamiento de falta de Joya que el travesaño repelió. Con los minutos, los cachorros se fueron asentando en el terreno de juego y poco a poco se fueron haciendo con el control. Las llegadas comenzaron a sucederse especialmente con un Bengoa, que a la media hora adelantó a los de Ziganda. El centrocampista controló un balón peinado por Andoni López y batió con un zurdazo a Lejarraga.

Los madrileños que desde el lanzamiento de falta a la escuadra casi no habían dado señales de vida en ataque pudieron empatar, pero Joaquín se encontró con un magnífico Unai Simón. Brillante parada del guardameta. Un susto que puso en alerta a los jugadores del filial que se lanzaron a por el gol de la tranquilidad. Un tanto que rozaron en los minutos finales de la primera mitad, pero Jurgi se topó con el poste y Tarsi, en dos ocasiones, con Lejarraga.

Tras pasar por vestuarios, el partido empobreció. Los cachorros perdieron el dominio del encuentro. A pesar de que dominaban el balón, no fueron capaces de concretar cuando llegaban a tres cuartos de campo. No fue hasta los minutos finales cuando los de Ziganda volvieron a rozar el gol. Sillero remato de cabeza una falta lanzada por Seguín, pero el zaguero se encontró una vez más con Lejarraga, el mejor del conjunto madrileños. Segundos después, Guruzeta vio cómo su remate se iba desviado por centímetros.

En los minutos finales, el Navalcarnero se fue al ataque pero se toparon con un Bilbao Athletic solvente que sumó tres puntos seis partidos después. La nota negativa del encuentro fue el conato de tángana que se produjo tras el pitido final y que afortunadamente no pasó a mayores.

Otros partidos

Por su parte, el Sestao encajó una derrota muy dolorosa ayer en Las Llanas (0-1), ante un rival situado en la zona baja y que se tomó un importante respiro en la clasificación a costa de los verdinegros, cada vez más hundidos. La UD Logroñés solo necesitó una ocasión para meter el único gol de la tarde en la segunda parte, obra de Caneda.

El Barakaldo no logró ayer, por primera vez, sumar su tercera victoria consecutiva en lo que va de Liga pero sí se quedó con un valioso punto que le mantiene a un triunfo de la zona de play-off, ocupando la séptima plaza. Un empate a cero ante un serio San Sebastián de los Reyes que permite a los fabriles seguir mirando hacia arriba, aunque lo cierto es que merecieron algo más durante el transcurso del envite.

El Zamudio vio como volaban dos puntos vitales de Gazituaga en los minutos finales. En el último momento, el Mensajero logró un empate a uno en un nuevo golpe para el conjunto tecnológico, que ve como la salvación se sitúa a trece puntos, mientras que el puesto de promoción está a diez de distancia.

Y el punto de penalti echó al traste el buen trabajo del Amorebieta en su visita a Fuenlabrada (1-0), donde, a pesar de vérselas con uno de los cocos de la categoría, dio la talla hasta el punto de poder pescar un punto. Y es que los hombres de Aitor Larrazábal anularon por completo a un equipo que tuvo en los once metros la única escapatoria para seguir su buena senda liguera y hundir un poquito más, y con una jornada menos por jugarse, al conjunto vizcaíno (1-0).